La UEFA anunci? ayer que abre una investigaci?n contra el Barça por el ‘caso Negreira’. Seg?n el escueto comunicado hecho p?blico por el m?ximo organismo del f?tbol europeo, la decisi?n se toma en base a una “posible violaci?n del marco legal”. A partir de ahora, se abren la veda a todo tipo de especulaciones sobre una hipotética sanci?n que podr?a, incluso, acarrear la expulsi?n del club blaugrana de las competiciones continentales. Dejar al Barça fuera de la Champions ser?a un golpe dur?simo para el prestigio de la entidad, pero también para su delicada econom?a. Un castigo excesivo por esos malditos informes arbitrales por los que, a lo largo de casi dos décadas, se han pagado 7,5 millones de euros a Enr?quez Negreira y su hijo.

La UEFA, que mira hacia otro lado cuando el Manchester City o el PSG incumplen sistem?ticamente el ‘fair play’ con sus falsos patrocinadores (que no son otros que los propios propietarios de los clubs, los jeques ?rabes y sus petrod?lares), parece dispuesta a cebarse ahora con el Barça por una cuesti?n mucho menor. Porque, b?sicamente, no hay ninguna prueba de que el club blaugrana pagara por conseguir ayudas arbitrales. La participaci?n activa del Barça y su presidente, Joan Laporta, en la puesta en marcha de la Superliga tiene, sin duda, mucho que ver con la apertura de esta investigaci?n y sus posibles consecuencias. Aleksander Ceferin se siente gravemente amenazado por el proyecto y har? todo lo posible para frenarlo.*Le tiene ganas al Barça...

EL BAR?A DEBE PRONUNCIARSE

Con la investigaci?n que ahora abre la UEFA, todos los ‘actores’ del ‘caso Negreira’ ya se han pronunciado. Lo han hecho la Federaci?n Espa?ola, la Liga, el Madrid, los clubs de Primera Divisi?n, la Fiscal?a Anticorrupci?n... Solo falta el Barça. Que es quien debe defenderse de las acusaciones. Laporta ha protagonizado un par de intervenciones épicas proclamando la inocencia del club y asegurando que todo se trata de una campa?a para desestabilizar al equipo, desprestigiar la imagen del Barça e intentar controlarlo.

El presidente ha ordenado una auditor?a externa y la entidad ha empezado a presentar demandas a los periodistas y medios de comunicaci?n que han difamado al club. Pero falta una explicaci?n oficial de por qué se contrat? a Enr?quez Negreira y se le ha mantenido en n?mina durante veinte a?os. Laporta (y los otros presidentes implicados: Gaspart, Rosell y Bartomeu) tiene que darla. Pronto. Cada vez es m?s urgente... Porque el ‘tsunami’ parece imparable.*



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