"Chicas, vest?os que haremos una foto antes de empezar el show. ?Es que si no las aviso estas se despelotan a la m?nima! ?No se pueden ver pechos ni nada, verdad?". As?, con esta pregunta, Juani de Luc?a, la reina y jefa del Bagdad, empez? el reportaje de este diario en el local de show er?tico m?s famoso de Barcelona. All?, en esa sala subterr?nea situada junto al abandonado Teatre Arnau empez? la carrera de Nacho Vidal, actor porno cuya vida encarna el actor Marti?o Rivas en la serie 'Nacho', recién estrenada en ATRESplayer PREMIUM.

Gran parte de la serie se grab? all? hace un a?o, tras mantener el local cerrado dos a?os por el covid y un mes antes de volver a abrir las puertas coincidiendo con el Mobile World Congress. "Abrimos el 26 de febrero cuando el rodaje a?n no hab?a terminado. Por la ma?ana rodaban la serie pero por la noche ten?an que sacarlo todo para entrar nosotras. Aqu? trabajan 40 personas", dice orgullosa. La muerte de su marido hace dos a?os la ha dejado sola al frente de la sala donde hicieron sus pinitos un mont?n de actores y actrices porno. "Yo nunca he actuado", aclara, sentada en el sill?n de mando de su despacho desde donde controla todo lo que ocurre en los diferentes espacios de la sala: hay c?maras por todos lados.

En la serie Pepa Charro, la Terremoto de Alcorc?n, encarna a la patrona del Bagdad. "No me gusta demasiado la caracterizaci?n por ahora, pero hay que ver m?s cap?tulos para opinar", admite la descubridora de Nacho Vidal.

Sala Bagdad en Barcelona. | MANU MITRU
"Vino aqu? cuando no le conoc?a nadie. Ten?a muy claro que le gustaba el sexo y que quer?a ser una figura mundial del porno. Era joven, apuesto y con una buena herramienta", dice en referencia a su verga XXXL, famosa por sus 25 cent?metros, que aparece en el plano final del primer cap?tulo gracias a un cameo de la estrella porno. "A Nacho le iba la diversi?n y el sexo, pero ese constante desenfreno que retrata me ha sorprendido. Echo de menos su parte positiva", dice Juani, que confiesa haberse enterado de muchas cosas que desconoc?a de él a través de ese cap?tulo inicial.

"Nacho ten?a un don", recuerda. Su novia de entonces, Sara Bernat -una prostituta con quien empez? como pareja en el porno show- fue quien le anim? a ir al Bagdad. "Ella pens?: esto hay que rentabilizarlo. Como dice Shakira. ?Quer?a hacer caja!", suelta entre risas Juani. Admite que la primera vez que vio a Nacho Vidal desnudo la impresion?. M?s all? del tama?o de "su herramienta", conect? con él. "Nacho era un t?o guapo, atrevido, descarado y exhibicionista, que es algo muy importante. Le gustaba que le miraran".

Apost? por él. ?l y su novia empezaron a trabajar. Primero aprendieron unas coreograf?as m?s teatrales para ambientar las escenas de porno antes de pasar al sexo puro y duro. "Lo ensayamos todo menos las partes de sexo porque Nacho siempre estaba listo, erecto. No fallaba nunca. Por eso nos sorprendi? tanto que se le encogiera en su debut".

Y no solo fue ese d?a: "A Nacho le cost? hacer funcionar su herramienta en p?blico". Tard? dos semanas, cuenta. En el escenario no funcionaba pero era traspasar la cortina que le separaba de la sala se le pon?a dura como una piedra. "?l se enfadaba. ?C?mo puede ser?, se preguntaba". Ten?a 22 y no entend?a nada. Juani tuvo paciencia. "Yo confiaba en él y segu? pag?ndole igualmente. Sab?a que el d?a que los nervios dejaran de jugarle malas pasadas e hiciera su primer show completo, se desbloquear?a. Y as? fue. Nacho es un animal sexual".

Sala Bagdad en Barcelona. | MANU MITRU
La Transici?n, época dorada

La mejor época del Bagdad, cuenta, fue al principio, en plena Transici?n. "La gente prefer?a venir aqu? que ir a ver pel?culas a Perpi??n. Cada noche la cola para entrar daba toda la vuelta". Ahora, tampoco les va mal. "Con los a?os que llevo aqu? me sorprende ver c?mo hemos avanzado. Aqu? vienen muchas mujeres. A veces, en pareja. Y ves al hombre sentado mientras ella sube al escenario y practica sexo con un actor. ?C?mo hemos cambiado!. En el Bagdad la gente se libera". Ofrecen varios pases y las entradas no son baratas: 90 euros. Y cada noche, cuenta, hay quien se lanza a practicar sexo en directo.Juani es la guardiana de las esencias del Bagdad. Lleva abierto desde 1975, en el que hab?a sido el local de la famosa vedette La Bella Dorita. Su normas son claras: todo lo que ocurre en el Bagdad se queda en el Bagdad, el sexo que se practica en la sala ha de ser consentido, no le interesan n?meros que utilicen simbolog?a religiosa y del sado, solo acepta la parafernalia para dar un toque diferente. "Cuido mucho el espect?culo, no tengo escenas fuertes que puedan herir la sensibilidad", apunta.

Desde que se ha anunciado la serie tiene m?s peticiones que nunca de gente que quiere una oportunidad para trabajar en el Bagdad. "Cada d?a llaman m?s. A diario he de rechazar a gente porque tengo una plantilla con much?simos artistas. Tengo unos compromisos, n?minas y contratos que pagar", explica Juani. Si ma?ana se presenta otro con "un don" como Nacho Vidal lo tiene complicado.

Evidentemente, espera que la serie reporte m?s p?blico a la sala, tanto para aquellos y aquellas que ya la conocen como para quien nunca ha puesto los pies en el Badgad. Publicidad, dice, necesita poca porque su sala es un cl?sico de la ciudad. "La gente viene a Barcelona por tres cosas: Sagrada Fam?lia, Barça y Bagdad".



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