Una semana después de que estallara el esc?ndalo Negreira, Laporta dio por fin alguna explicaci?n. Pero fue de pasada, aprovechando un acto, y sin aceptar preguntas.

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Que el Barça no admita preguntas denota que no tiene respuestas. Y peor a?n, que desde el punto de vista de la comunicaci?n va a remolque de los acontecimientos desde el primer momento. La gesti?n que ha hecho el club de todo este oscuro caso no puede haber sido m?s desafortunada: primero hasta cuatro presidencias diferentes se ha pasado a?os escondiendo esta pr?ctica dudosa, y luego, cuando ya han sido pillados por Hacienda en una informaci?n convenientemente filtrada, la desorganizaci?n ha sido colosal.

Durante unos d?as el portavoz del club ha sido Joan Gaspart, que ha hecho un tour por todos los medios. De Sandro Rosell no sabemos nada. De Bartomeu, que solo ha querido hablar para medios de Madrid y que fue él quien lo par?. Y de Laporta, primero que era una conspiraci?n en contra del equipo y m?s tarde, después de un largo silencio, que Tebas va en contra del Barça, algo que aunque sea cierto no tiene nada que ver con el caso. La sensaci?n que han dado los cuatro presidentes es que, por acci?n u omisi?n, solo piensan en protger su interés. ?Pero quien piensa en el Barça? ?Alguno de los cuatro est? calibrando el da?o terrible que le est?n haciendo al club los que quieren manchar todos los t?tulos que ha conseguido en los ?ltimos a?os?

Algo tan grave no puede zanjarse con el informe de un abogado, como sugiri? Laporta, al estilo de Bartomeu cuando deleg? en un auditor el informe sobre el primer 'Barçagate' para ganar tiempo. Estamos ante una grave crisis de credibilidad, que m?s que afectar a personas concretas, amenaza toda la instituci?n. Por eso ser?a una gran noticia que se organizara una comparecencia conjunta de todos los presidentes implicados en el caso: Gaspart, Rosell, Bartomeu y Laporta. Que los cuatro atendieran conjuntamente a los medios de comunicaci?n admitiendo cualquier pregunta ser?a un golpe encima de la mesa, y se convertir?a en un acto de responsabilidad con el socio. Es una foto dif?cil de gestionar, y por algo no se ha conseguido nunca, pero servir?a para ejemplificar que, al menos por un d?a, han puesto por delante los intereses del Barça a los suyos propios.



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