La resiliencia del Atlético se enfrentaba al car?cter ind?mito del Real Madrid. El equipo que nunca se rinde, el del Simeone, ante el que siempre lucha hasta el final, el de Ancelotti. Y gan? el primero. En un duelo que confirma que un partido de f?tbol es la vida condensada en 90 minutos. Ansiedad, drama, alegr?a, tragedia, euforia...

M?s informaci?n (Auto)


T?tulo noticia (Auto)





97082364

Entre el colmillo y la misericordia

La misericordia que el Real Madrid mostr? en la final de Riad ante el Barcelona hizo pensar a m?s de uno que ante el Atlético los blancos tampoco mostrar?an colmillo, toda vez que ten?an el est?mago lleno tras el primer t?tulo de la temporada. Pero Ancelotti advirti? en la previa que alinear?a "el mejor once posible para este partido" y eso incluy? a su mejor ataque, incluido Rodrygo. A?adi? una permuta, la de Camavinga por Tchouaméni que lejos de ser una rotaci?n da m?s lustre porque Eduardo tiene m?s jerarqu?a que su compatriota.*

Simeone, por su parte, apost? por Witsel en lugar de un err?tico Savic y entreg? la derecha a Marcos Llorente, al que pidi? sin éxito que llegase a l?nea de fondo. Orden? una presi?n alterna, a veces alta y otras media, pero este Madrid presenta unos automatismos que delatan el oficio de sus jugadores,. Sus centrocampsitas siempre se escalonan para superar las l?neas de presi?n rival. Primero Valverde, después Camavinga, luego Modric...*Pero los del Cholo priorizaban el equilibrio.

A los diez minutos Bellingham recibi? en el ?rea y se sac? de encima a dos defensores sin arrugarse el frac, pero su disparo se top? con el larguero de un Oblak ya resignado. Estaba c?modo el Madrid y no terminaba el Atlético de conectar por fuera, donde Carvajal siempre recib?a ayuda de Valverde con Lino. Sin duda, Ancelotti recordaba la derrota en Liga. Pasada la media hora revoloteaban los visitantes sin picar y a los locales el Metropolitano se les extremadamente largo, porque adem?s Griezmann siempre ten?a pareja de baile, fuese Valverde o Camavinga. Parec?a mejor posicionado el Madrid, con y sin bal?n, ante un Atlético agazapado.**

Image ID:
97086039
Rodrygo se marcha de De Paul y Hermoso.
Rodrigo Jiménez/EFE
/clip/72dc1345-7b1e-4881-97eb-7116e1b09a50_16-9-aspect-ratio_default_0.jpg
880
495

Tres errores, tres goles

Pero el f?tbol es un juego de errores y a los 40 minutos la fe de Lino le llev? a perseguir un pase al que nunca habr?a llegado si Rudiger no la hubiese prolongado err?neamente, descolocando a Carvajal, y permitiendo al brasile?o madrug?rsela a Lunin. El Madrid, que hab?a interpretado el partido en un tempo 'andante', se ve?a obligado a cambiarlo por un 'vivace'. El partido se puso ?spero, con Bellingham protagonizando un rifi rafe y Vinicius siendo amonestado por protestar. Tarjeta que precedi? a un centro lateral sin peligro aparente en el que Oblak despej? de pu?o y metiendo la pelota en su porter?a. El gozo del Cholo en un pozo.

Arranc? la segunda parte con un truco de prestidigitador de Bellingham en el ?rea que dispar? la ansiedad atlética, lo que hizo que Simeone recolocase a Llorente en el medio, dando la banda a Nahuel. Pero dec?amos que el f?tbol es un deporte de errores, y se produjo otro del Madrid, en el que volvi? a aparecer Rudiger en la foto. Camavinga desvi? un pase, y entre un pasivo Rudiger y un desubicado Lunin la pelota qued? en los pies de Morata, que la empuj? a la red. Un sospechoso inusual como Rudiger se convert?a en el mejro c?mplice Atlético.


El gol vitamin? la presi?n atlética, mientras Ancelotti sub?a dos marchas con Kroos y Brahim. El destino volvi? a jugar del lado atlético en un remate de Rodrygo que desvi? un defensa y tropez? en el larguero de un Oblak ya batido. Pudieron poner la puntilla Griezmann y Morata, pero Lunin achic? bien. El partido se mud? a las ?reas, y jugar a la ruleta rusa con el Madrid no es recomendable. Joselu, en el primer bal?n que tocaba, empat?. Y el choque se fue a la pr?rroga, esa agon?a balompédica que colinda con el masoquismo y precede al abismo de los penaltis. Y entonces apareci? Griezmann, remont? la l?nea de fondo, se hizo hueco y clav? su zurdazo en la escuadra. Un gol que acompa?? otro de Riquelme en la jugada final. Un final poético, con el Karajan rojiblanco dirigiendo la orquesta y el Madrid haciendo mutis en la Copa. As? es el Atlético, ya lo avis? Sabina: ?Qué manera de sufrir, qué manera de ganar!



أكثر...