Intentar derribar un muro de un cabezazo no parece la mejor de las ideas, pero el Atlético utiliz? esta t?ctica para llevarse los tres puntos. El conjunto rojiblanco consigui? superar el entramado defensivo planteado por el Mallorca gracias a un testarazo de Antoine Griezmann, que volvi? a llevar en volandas a los suyos hacia una nueva victoria, la decimosexta consecutiva como local en el campeonato doméstico.

Los roles que iban a desempe?ar ambos conjuntos quedaron bien definidos desde el arranque. El Atlético de Madrid llev? el peso ofensivo, gozando de buenas ocasiones para adelantarse por mediaci?n de Morata y Correa pero, salvo estos dos sobresaltos puntuales, el Mallorca supo contener las acometidas rojiblancas. En el momento de atacar, eso s?, los bermellones se mostraron excesivamente contemplativos.

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El ?nico capaz de inquietar m?nimamente a Oblak fue Abd?n Prats, y ni siquiera pudo culminar la acci?n. Sigiloso como un felino, Pablo Barrios le quit? el bal?n de los pies, evitando lo que pudo ser el primer tanto del partido. El canterano rojiblanco estaba brillando con luz propia, y a su acierto en defensa se a?adieron dos brillantes asistencias que Morata no pudo culminar.

A pesar de su incontestable dominio, el primer disparo a puerta del Atlético no lleg? hasta la segunda parte. Fue obra de Morata, el m?s participativo de los pupilos de Simeone, pero los reflejos de Rajkovic impidieron que el testarazo del internacional espa?ol terminase en el fondo de la red.

El conjunto rojiblanco estaba atascado en el barrizal que hab?a planteado el Mallorca, por lo que Simeone decidi? mover ficha desde el banquillo. Los elegidos fueron De Paul y Riquelme que, nada m?s saltar al césped, celebraron el ansiado tanto inaugural.

No se puede decir que ninguno de los cambios tuviese incidencia directa en el gol. Para ser justos, no tuvieron tiempo. Apenas hab?an transcurrido unos segundos desde su ingreso cuando Mario Hermoso, desde la sala de m?quinas, sirvi? un centro en busca del coraz?n del ?rea. All? encontr? a Griezmann que, con un sutil movimiento de cuello, imprimi? a su testarazo un efecto que hizo in?til cualquier esfuerzo de Rajkovic.

La diana del 'Principito' trastoc? los planes del Mallorca, que dio un obligado paso al frente. Ndiaye, que acababa de entrar al campo, tuvo en sus botas el tanto del empate, pero le temblaron las piernas en el momento de culminar el mano a mano. Esta acci?n disip? cualquier amago de reacci?n bermellona, y el Atlético de Madrid no pas? apuros para mantener la m?nima ventaja.

En la recta final del encuentro, Simeone brind? a Memphis sus primeros minutos después de superar su lesi?n. El neerlandés estuvo a punto de convertir en gol uno de los pocos balones que toc?. También fue un dia especial para Koke, que celebr? su partido n?mero 600 como rojiblanco con una victoria.



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