S?, el club, la instituci?n, se enfrenta a un serio problema social que va mucho m?s all? de quién esté al frente de la entidad. Faltan muy pocos d?as (el pr?ximo jueves d?a 30) para que expire el plazo de actualizaci?n del censo de la masa social del FC Barcelona y todav?a deben cumplir con ese requisito el 40% de los aproximadamente 143.000 socios que tiene el club. Una barbaridad… que no es nueva, aunque la actual alcanza una dimensi?n muy preocupante.

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La ?ltima actualizaci?n del censo se puso en marcha bajo la presidencia de Sandro Rosell y todo el proceso lleg? a durar casi dos a?os porque esa regularizaci?n fue muy compleja al aflorar numerosas irregularidades: miles de socios que hab?an muerto y no se hab?an comunicado, carnets a nombre de personas inexistentes, incluso a nombre de animales, duplicidades… *En 2011 el FC Barcelona contaba con unos 176.000 socios, una burbuja que no se correspond?a con la realidad social del club.

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Hoy, diez a?os después de cerrarse el censo en noviembre de 2013, el problema es mucho mayor, porque no es lo mismo pasar de 176.000 socios a 143.000, que de 143.000 a 100.000, por ejemplo, porque el m?sculo social del FC Barcelona se empobrece. Es decir, que haya tantos socios que pasen ol?mpicamente del club pone de manifiesto muchas carencias: desafecci?n a la entidad, pérdida de interés… Y no es, tampoco, un hecho puntual. Lo venimos viendo en las asambleas y en el n?mero de abonados que se han apuntado a Montjuïc. Algo est? pasando.

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La responsabilidad es individual de cada socio, obviamente, y solo cabe apelar a eso, de ah? que el club poco pueda hacer. Sin embargo, al FC Barcelona, porque esto s? est? en sus manos, se le debe exigir que haga pedagog?a y destine los recursos necesarios para concienciar a sus socios de esa obligaci?n estatutaria. Y eso no se ha hecho, al menos como debe hacerlo un club de la dimensi?n del FC Barcelona. En 2011, la entidad destin? un mill?n de euros a esa campa?a de concienciaci?n: puso carpas en el Camp Nou, también en diferentes ciudades de Catalunya, anuncios en prensa y radio, e instal? una oficina en el club exclusivamente para el censo. Hoy, el ?rea social del FC Barcelona, que deber?a ser una absoluta prioridad para tratar a los socios y abonados como se merecen, est? bajo m?nimos. No basta con llamadas telef?nicas o dando entrevistas.

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El Barça de toda la vida, ese sentimiento de pertenencia que pasa de abuelos a padres y a nietos, est? muriendo. Urge que, desde el club, y desde todo el barcelonismo, se abra un debate serio y profundo para reflexionar. Antes de que sea demasiado tarde.*



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