Una apuesta combinada deportiva realizada el 27 de noviembre de 2020 en relaci?n con un partido de f?tbol entre dos equipos de la segunda divisi?n de Bulgaria le report? a un suculento premio de algo m?s de 64.000 euros. Pero la plataforma online a través de la que prob? suerte anul? la jugada minutos antes de que comenzase el encuentro al apreciar indicios de fraude, concretamente de “uso de ventaja desleal” por “estar en conocimiento del resultado” de dicho acontecimiento deportivo. Dado lo abultado de la cantidad econ?mica en juego, este caso acab? en la v?a judicial. Y un juzgado de Primera Instancia de Vigo primero y la Audiencia Provincial de Audiencia Provincial a continuaci?n han condenado a dicho portal, Winamax S.L., a pagar el premio al apostante: los magistrados consideran que la empresa no acredit? las conductas fraudulentas alegadas a lo largo del procedimiento judicial, que son, resumen, “meras conjeturas”.

El partido en cuesti?n enfrentaba al Lokomotiv Sofia y al FK Septemvri Simitli. El hoy demandante, que hizo una apuesta combinada en la que introdujo otro encuentro m?s de la liga espa?ola entre el Barcelona y el Osasuna, se la jug? apostando 7.840 euros y acab? ganando 64.719 euros, la cuant?a que ha dado lugar a este litigio. Aunque inicialmente la casa de apuestas online justific? la cancelaci?n del premio por considerar que el apostante hab?a hecho uso de lo que se denomina “ventaja desleal”, ya en la v?a judicial agreg? otra serie de “pr?cticas prohibidas” que a su juicio eran indicadoras de que el jugador hab?a “enga?ado” a la plataforma.

Los magistrados concluyen que no se ha aportada prueba del fraude. Una de las cuestiones que argument? Winamax, junto al conocimiento previo del resultado del partido, es que este jugador estaba “en connivencia” con otro de Guadalajara ya que usaron la misma direcci?n IP para realizar apuestas. La casa de apuestas incluso aleg? que podr?a haber una especie de organizaci?n de apostantes “que hacen jugadas aprovech?ndose de partidos de integridad sospechosa para llevarse mayores ganancias”. La Audiencia Provincial de Pontevedra, concretamente su Secci?n Sexta de Vigo, indica que esta cuesti?n no se acredit? y que ambos jugadores negaron conocerse.

Otra de las cuestiones introducidas es que la cantidad apostada –7.840 euros– era “anormalmente alta para el historial del demandante”. “Que el jugador no suela apostar esas cantidades, sin otros elementos de juicio que corroboren lo que pretende la parte apelante, es insuficiente, m?xime cuando él mismo afirm? que s? hace algunas [apuestas] de este tipo y cantidad y que apuesta tanto en este liga [la b?lgara] como en otras europeas”, afirma la sala, que también desecha el argumento de que sobre el hombre ya hab?a sospechas en relaci?n con otros eventos deportivos.

Contra la sentencia, que no era firme, cab?a recurrir en casaci?n ante el Supremo. Un litigio millonario promovido también en Vigo contra otra casa de apuestas acab? llegando a este Alto Tribunal: en ese caso los magistrados le dieron la raz?n a la empresa, Cirsa, y el jugador no recibi? los casi tres millones de euros ganados al concluirse que se aprovech? de un error de c?lculo en las cuotas.



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