No me gusta el color blanco, pero me gusta la nueva camiseta del Barça. Prefiero el azul, el rojo o el negro, pero me atrae la segunda equipaci?n del primer equipo. El sencillo dise?o de Nike, con esas pinceladas azulgranas en el reborde de la manga, el antiguo escudo culé sobre un blanco radiante y los pantalones azules junto a las bandas de los calcetines hacen que la nueva vestimenta del Barça tenga un estilo propio, moderno y atractivo.
Quiz? a algunos no les guste. Normal. Sobre gustos no hay nada escrito, pero si nos ce?imos estrictamente al dise?o, pienso que el acierto es total. La prueba es la locura que se ha producido en las tiendas exclusivas del Barça que ya la tienen a la venta o la demanda existente en las que todav?a no la han recibido.
A todo esto, la acertada campa?a de promoci?n del club, con buenas fotos y v?deos de los jugadores del primer equipo ejerciendo de modelos, convertir?n a la primera camiseta blanca desde que la luci? Johan Cruyff como futbolista, en un récord absoluto de ventas. De hecho, desde el club ya apuntan que la empresa textil norteamericana se ha quedado corta en la producci?n.
Es verdad que también est?n aquellos culés a los que el blanco les produce urticaria, los culés que desconocen que el Barça ya visti? de blanco, concretamente en 1978 en partido de ida de la UEFA donde el propio Cruyff marc? dos goles, y, finalmente, los culés que est?n en contra de todo. En contra de innovar, de debatir sobre el modelo de gesti?n del club… En fin, as? es el Barça.
Me comenta David Bernabeu, que estuvo en la tienda del Camp Nou, que hubo carreras para conseguir la nueva camiseta. Lo entiendo y me reitero; a m? me gusta. No obstante, lo realmente importante es lograr t?tulos. Mientras ganen, el color de la camiseta ser? lo de menos. Aunque estoy seguro de que para algunos culés, los m?s rebuscados, les dar?a m?s morbo levantar una copa vestido de blanco que de azulgrana…
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