S? se?or, todo el mundo, todos, los 176 corredores que tomaron la salida en Bilbao y todos, todos, los que han participado en este maravilloso mundo del ciclismo, del Tour, de la serpiente multicolor han de estar orgullosos, satisfechos, locos de contentos con todo lo que han hecho, con lo que nos han hecho disfrutar desde el sof?, desde la cuneta, desde cualquier rinc?n del mundo.

Es cierto, auténtico, pura verdad, que el Tour es, con diferencia, después de los Juegos Ol?mpicos y la Copa del Mundo de f?tbol, el mejor espect?culo deportivo del mundo. No hay otro podio en el deporte mundial. Habr?, s?, claro, puntos de encuentro igualmente ilusionantes y espectaculares como los cuatro Grand Slams de tenis, las decenas de grandes premios de F1, MotoGP y otras grandes competiciones, pero el Tour es vistosidad, pasi?n, cine, televisi?n, diversi?n, espect?culo, fuerza, locura, sangre, sudor y l?grimas, las que ha derramado y sufrido hoy, a borbotones, Carlitos Rodr?guez, que, pese a todo, ha defendido en meta el top-5 de un Tour 2023 dur?simo en el que todo, todo, tiene su valor, incluso acabar quinto a 12.57 minutos del ganador como ha logrado Carlitos o el tremendo Pello Bilbao, sexto con 33 a?os, a 13.27 minutos.

Gracias por todo

Es el momento de escribirlo después de tres semanas ?nicas, espectaculares y de todo tipo de comportamiento de los grandes ciclistas, de los can?bales de la ruta. Todos han corrido a su manera, a su estilo y todos, todos, han ganado. No hay perdedor. Est? el inmenso Jonas Vingegaard, cierto, pero es mentira que Tadej Pogacar, que llegaba como favorito tras una preparaci?n inadecuada para el Tour, haya perdido, haya fracasado. Como él reiter? el jueves, “el tiempo, la juventud, est? a favor m?o”.

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Claro que s?, Pogacar, este monstruo al que todo el mundo adora porque es atrevido, ?m?s atrevido que nadie!, ha terminado ganando la etapa de este s?bado, la tercera ‘etapa reina’ de la Gran Boucle, y lo ha hecho por delante del ya m?tico bicampe?n de la ronda francesa, el danés Vingegaard.

Hay sido hermoso, demasiado hermoso, fant?sticamente bello: Pogacar acaba primero el s?bado divino y es segundo en el Tour; Vingegaard acaba segundo y ser? el primero en los Campos El?seos. ?Hay mejor premio pero los dos grandes del siglo XXI? No, no hay mejor premio. Solo agradecimiento eterno a ambos.

Ya ni les cuento, aunque esos m?gicos gemelos, Adam y Simon Yates, se hayan metido en medio, acaparando la tercera y cuarta plaza, el placer que debemos sentir los espa?oles por el papel ?por fin! ?por fin! desempe?ado por los ciclistas de casa. Lleg?bamos a este Tour, que encima se bautizaba en la maravillosa y espectacular Bilbao, en el cicl?stico Pa?s Vasco, con 100 etapas seguidas sin ganar, con cinco a?os de sequ?a y, de pronto, ganamos con Pello Bilbao, Ion Izaguirre y Carlitos Rodr?guez.

Podio merecido

Ma?ana, en la fiesta de los Campos El?seos, no habr? espa?oles. El podio estar? encabezado por el inmenso, el tremendo, el dominador danés, Jonas Vingegaard, que ha superado por 7.29 minutos al no menos tremendo Tadej Pogacar, que estar? protegido por su m?s fiel gregario, Adam Yates. Pero debajo, en los pies del podio, estar?n otros dos grandes como Carlitos Rodr?guez y Pello Bilbao, uno con 22 a?os, la esperando del ciclismo espa?ol, la ilusi?n de la nueva generaci?n de admiradores, y el gran Bilbao, que, con 33, ha realizado un Tour digno de admiraci?n.

Ha sido, como casi siempre, un Tour maravilloso, apasionante, un Tour que, contrariamente a lo que dice la clasificaci?n, es decir, contrariamente a esos casi 8 minutos que hay entre los dos monstruos del siglo XXI, Vingegaard y Pogacar, lo cierto es que la incertidumbre ha sido constante e, incluso, hasta la ?ltima etapa, hasta la ?ltima gran batalla, hay sido espectacular, pues todos, todos, los que ten?an que estar han estado y todos, todos los que ten?an que pelear, han peleado hasta el ?ltimo suspiro.

Por eso debemos agradecerles a estos muchachos, j?venes y veteranos, que nos hayan ofrecido el mayor espect?culo del mundo que, visto desde el sof?, ha sido ?nico, inigualable, maravilloso.



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