Tres aviones de combate y tres pilotos ya probados en misiones de la OTAN volar?n por parte de Espa?a en las maniobras Air Defender 2023, que la Alianza Atl?ntica activa este lunes en el que ser? el mayor ejercicio militar aéreo de su historia.

Defensa aportar? tres cazas Eurofighter Typhoon del Ala 14 del Ejército del Aire y el Espacio (EAE) para combinarse en un mismo mando aéreo con otros 30 cazas iguales que desplegar? la Luftwaffe alemana. Las maniobras se llevar?n a cabo, en su mayor parte, en el espacio aéreo alem?n y con duraci?n prevista hasta el 23 de junio. Un total de 200 aeronaves ser?n movilizadas por la OTAN para el ejercicio. Cien de esas aeronaves son aportaci?n norteamericana y 46 ser?n cazas del ejército alem?n.

Los tres cazas que aporta Espa?a formar?n parte de un ficticio grupo aéreo de interceptaci?n de la OTAN ante el ataque recibido por uno de sus aliados. Los aviones espa?oles participar?n en el ensayo durante cuatro d?as, entre los pr?ximos 12 y 16.

Lo m?s moderno

La aportaci?n espa?ola a estas maniobras, el mayor mensaje disuasorio que env?a la OTAN a Rusia este a?o, consiste en tres de sus m?s modernos y potentes aviones de combate, y de la unidad m?s operativa del EAE. En el ala 14, con base en Los Llanos (Albacete), opera la élite de los pilotos militares espa?oles. Pero el séquito humano que acompa?ar? a estos cazas es, seg?n fuentes del Ejército del Aire, "el m?nimo necesario para apoyar el despliegue".

La organizaci?n de las maniobras Air Defender 2023 ha encajado las necesidades de apoyo log?stico de las naves desplazadas a Alemania para este simulacro. Son 22 los pa?ses participantes y, dado que también se pone a prueba la capacidad de prestar asistencia a distintos aviones de distintas naciones de una forma no estanca, la pr?ctica totalidad del trabajo a?adido en tierra ser? desempe?ado por profesionales de la Luftwaffe.

La misma unidad que Espa?a env?a a Air Defender 23 estuvo desplegada en el Destacamento Aéreo T?ctico ?mbar, en la base aérea de ?mari, en Estonia, en el verano de 2022, en un trabajo --en este caso nada de simulacros-- de vigilancia de vuelos rusos no debidamente identificados. Fueron las labores de la misi?n Polic?a Aérea del B?ltico (BAP) de la OTAN.

En el espacio aéreo de Estonia, los Eurofighter espa?oles volaban en binomio con los Eurofighter alemanes, en servicios QRA, o de reacci?n r?pida. En esa vigilancia iban armados con misiles aire-aire para posibles interceptaciones de aeronaves hostiles.

En un principio Defensa se planteaba enviar dos cazas y mantener uno de reserva, pero decidi? ampliar a tres a demanda de la OTAN, en la fase final de la organizaci?n de las maniobras.



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