Las tres mujeres que asaltaron el 29 de abril de 2022 la vivienda en Madrid del embajador de Ucrania en Espa?a, Serhii Pohoreltsev, deber?n cumplir seis a?os de prisi?n cada una por un delito continuado con fuerza en casa habitada. As? lo ha determinado el Tribunal Supremo en una sentencia que desestima los recursos de las tres procesadas al auto del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) que hab?a aumentado la pena inicial de cuatro a seis a?os tras el recurso presentado por el embajador.

La sentencia, contra la que no cabe recurso, pone punto y final al desagradable incidente vivido por el mayor representante ucraniano en Espa?a en su propia vivienda, situada en una zona de alto valor adquisitivo de la capital. Un robo que, adem?s, tuvo lugar solo dos meses después de la invasi?n de Rusia a su pa?s.

Las ladronas, Naomi S., Patricia J. y Kimberley J., de nacionalidad croata, entraron en casa de Pohoreltsev por el método del 'resbal?n' a primera hora de la tarde del citado d?a 29 de abril, sustrayendo bolsos de marca, relojes y ropa de lujo, adem?s de llevarse la caja fuerte, en cuyo interior hab?a 111.500 euros, 30.000 d?lares y 4.600 grivnas.

Casa vac?a

Seg?n relat? el propio embajador en el juicio, él hab?a salido a las ocho de la ma?ana de su residencia, dejando all? a su suegro, que viv?a temporalmente en la casa. A las cuatro de la tarde, sin embargo, el embajador qued? con él para desplazarse a la zona de la Puerta del Sol a realizar unas compras.

Las ladronas, tal y como qued? demostrado en el juicio, aprovecharon esa circunstancia y que no hab?a portero en el edificio para allanar la vivienda, en la que tampoco se encontraba personal de limpieza, ya que esa ocupaci?n la realizan los trabajadores de la embajada.

As?, sobre las 16.10 de la tarde, las ladronas usaron el método del 'resbal?n' para abrir la puerta del portal, forzando la cerradura con un objeto plano y r?gido, tal y como recogieron las c?maras de seguridad del portal.

Una vez dentro de la casa, sustrajeron joyas, objetos de valor y la caja fuerte que hab?a en el interior del armario. A la salida del inmueble, una de ellas se puso por delante, portando un bolso grande de cuero marr?n y, algo m?s distanciadas, las otras dos acusadas, llevando entre ambas un objeto muy voluminoso envuelto en una s?bana, que “portaban con gran dificultad” al tratarse de la caja fuerte, seg?n explic? el embajador en el juicio. Tras salir a la calle, esperaron a que la tercera compinche, que hab?a salido antes, llegara a un cruce cercano con el veh?culo que usar?an para emprender la fuga, un Fiat Panda alquilado pocos d?as antes.

Entre los objetos robados se encontraban, entre otros objetos, un reloj Chopard, cinturones de cuero de la marca Hermes, bolsos Dior, Bottega Veneta, Bulgari o Yves Saint Laurent, unas zapatillas de deporte Gucci y unos zapatos de la marca Louboutin.

Detenci?n

Pocos d?as después del robo, el 9 de mayo, una unidad de Polic?a Nacional, dentro de un operativo especial para tratar de encontrar a las ladronas, localiz? el Fiat Panda usado durante el primer asalto aparcado en la calle Doctor Fleming de la capital, consiguiendo atrapar a las ladronas cuando estaban perpetrando otro robo del que se hab?an llevado multitud de joyas, valoradas en total en casi 18.000 euros.

Aunque fueron condenadas en un primer término por la Audiencia Provincial a cuatro a?os de c?rcel, el TSJM elev? la pena a seis, como solicitaba el embajador, que pidi? revisar la circunstancia atenuante de reparaci?n de da?o que hab?a tenido en cuenta la primera condena en favor de las condenados.

Los magistrados del TSJM, sin embargom consideraron que la cantidad de 30.000 euros (10.000 cada una de ellas) que las acusadas ingresaron antes del juicio en concepto de responsabilidad civil se alejaba “en exceso del total" que se reclamaba tal y como solicitaba la acusaci?n particular y la Fiscal?a.

"Retorno muy parcial"

Ahora el Supremo ha ratificado la sentencia del TSJM, subrayando que la aportaci?n que realizan “no puede comportar la minoraci?n del reproche punitivo que se pretende”. “El pago carece de fundamento atenuatorio dado que supone un retorno muy parcial del importe robado y puesto que ?nicamente responde a la aspiraci?n de afrontar su actividad delictiva con un menor reproche penal del legalmente previsto, pero manteniendo los importantes rendimientos de los delitos que se sancionan”, se?ala el auto del Supremo.

“En el primero de los asaltos enjuiciados se hicieron con un bot?n cercano a los 300.000 euros, habiendo continuado su actividad delictiva para la obtenci?n de mayores ganancias [...] Las acusadas fueron detenidas una semana después de perpetrados los hechos y, sin haber tenido posibilidad material de gastar en su provecho lo sustra?do, s?lo devolvieron un 10% de lo sustra?do inmediatamente antes del juicio eludiendo facilitar cualquier informaci?n sobre el destino de los efectos o su paradero, tal y como subraya la sentencia de apelaci?n impugnada”, concluye el Supremo.



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