El Real Madrid deb?a afrontar tres partidos antes de jugar la final de Champions en Wembley. Tres tr?mites que Ancelotti, una vez m?s, gestionar? con esa inteligencia y fluidez que le caracteriza para llegar a Londres con el equipo en velocidad de crucero. Y el primero de ellos, este ante el Alavés, lo utiliz? para dos cosas. La primera, cerrar el debate de la porter?a gracias a la impecable actuaci?n de un Courtois que realiz? paradas de auténtico mérito. La segunda, recuperar una versi?n m?s brillante de un Bellingham que se divirti?, marc? y asisti?. Eso sumado a la debilidad defensiva de un rival que llegaba al Bernabéu de vacaciones, permiti? a los blancos exhibirse en un encuentro sin exigencia f?sica ni competitiva.


Un Real Madrid-Alavés con los blancos esperando el pitido final para irse tres d?as de vacaciones y los babazorros pensando ya en Ibiza ofrec?a unas expectativas sospechosas, m?s all? de ver c?mo los locales ofrec?an el trofeo de campeones de Liga a sus aficionados. Advirti? Carlo Ancelotti que el partido marcar?a un punto de inflexi?n porque tras el descanso después solo pensar? en la final de Champions, por m?s que tenga dos partidos de Liga atravesados en medio de la v?a. Quiz?s esa relajaci?n contagi? a sus jugadores, que en los primeros minutos se dejaron ir, lo que oblig? a Courtois a realizar una meritoria triple parada que arma de razones a Carletto para defender su titularidad en Wembley. Algo que se da por hecho.

El partido transcurr?a pl?cidamente sin faltas, sin agresividad, ni defensiva ni ofensiva, y con los ?nicos chispazos de un Vinicius para el que la grada ped?a el Bal?n de Oro. El once blanco era mucho m?s reconocible que el alavesista. El once de Wembley, salvo Militao por Rudiger, ante un Alavés plagado de desganados meritorios.

Bellingham, un gol y dos asistencias

El Madrid bostezaba con el bal?n en los pies, hasta que a los nueve minutos Kroos adivin? espacio a la espalda de la defensa vitoriana y envi? un pase que Bellingham trat? de prolongar al segundo palo, con la suerte de embocarla sin querer. Gol de Jude, un tanto revitalizador para el inglés, que debe recuperar tono f?sico para Wembley y acudir a la final como en la primera parte de la temporada. A la media hora Bellingham filtr? un env?o para un din?mico Camavinga, que dio el pase de la muerte a Vinicius para colocar el segundo. También particip? en el tercero el inglés, que sirvi? un pase a la llegada de Valverde, quien descosi? la pelota para batir por tercera vez a un Owono m?s aparatoso que efectivo. Al descanso el Madrid ya hab?a certificado un partido con aroma de pretemporada y se confirmaba que el Alavés hab?a salido en chanclas al Bernabéu.

La segunda parte dej? algunas gotas de orgullo de los visitantes, que llegaron con algo m?s de intenci?n al ?rea de Courtois, quien estuvo intachable en sus intervenciones. Especialmente en un disparo raso complicad?simo de Hago en el que el belga acert? a meter una mano que evidenci? que si antes de este partido Lunin ten?a complicado ser el portero en Wembley, después del choque ni cotiza que el ucraniano sea el elegido.

Jude y Vinicius, sociedad limitada

Pasaban los minutos con los de Luis Garc?a buscando el gol de la honra y la delantera madridista gust?ndose con malabarismos y virguer?as que terminaban por no concluir en gol. Dio el susto Militao al resentirse de la rodilla en una jugada, pero afortunadamente fue una falsa alarma. También Carvajal sufri? un doloroso pisot?n que no fue m?s all?. Carletto dio minutos a Arda Guler y a Ceballos mientras el Bernabéu cantaba a Kroos ?Toni, quédate! En ese momento Bellingham filtraba otro pase para Vinicius, que sin pens?rselo descerrajaba a Owono clavando la pelota en la escuadra para celebrar el cuarto. El inglés ha intervenido en 35 goles esta temporada (23 goles y 12 asistencias) y el brasile?o en 34 (23 goles y 11 asistencias). Pero la goleada la cerr? Arda Guler, remachando una contra que confirma que el turco adem?s de talento tiene gol (4 goles en 290 minutos, uno cada 72).

Al Real Madrid le queda visitar Villarreal y recibir al Betis, en el que ser? el ensayo general para la final de Wembley, mientras el Alavés est? salvado hace varias jornadas. Los blancos desconectan ahora tres d?as merecidamente en los que Ancelotti ha pedido a sus jugadores que se olviden del f?tbol y disfruten de sus familias y amigos. Ser? el ?ltimo respiro antes de afrontar la recta final de la temporada con la Champions esperando en Wembley, un estadio que a?n no figura en la historia del Real Madrid.



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