Un grupo de cient?ficos ha llegado a la conclusi?n de que las algas marinaspueden ser una fuente de alimento incre?blemente resiliente que podr?a salvar a la humanidad del hambre en caso de una guerra nuclear. El estudio, publicado en la revista Earth's Future, desvela que las algas marinas son lo suficientemente resistentes como para sobrevivir y prosperar en océanos tropicales incluso después de un conflicto nuclear. Los autores del informe son investigadores de la Alianza para Alimentar a la Tierra Durante Desastres y de universidades norteamericanas y de Filipinas.

Los investigadores construyeron un modelo basado en el alga Gracilaria tikvahiae, com?nmente conocida como hierba roja. Utilizando datos clim?ticos de un hipotético invierno nuclear, simularon el crecimiento que experimentar?an las algas en tan extremadamente adverso escenario.

A tenor de los resultados obtenidos, si estallara una guerra nuclear y se dispararan miles de misiles a lo largo del planeta, se expulsar?an a la atm?sfera 150 Teragramos (Tg) de holl?n, lo que bloquear?a la luz solar durante a?os.

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Distribuci?n mundial de las algas estudiadas
Universidad de Canterbury
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Pero, as? y todo, los investigadores descubrieron que a?n quedar?a suficiente luz solar para que las algas realicen la fotos?ntesis y crezcan. El carbono negro que permanecer?a en la atm?sfera no impedir?a que sobrevivieran.

Alimentar?an al 45% de la humanidad

Si se habilitara la extensi?n necesaria para producirlas, las algas marinas podr?an satisfacer el equivalente al 45% de la demanda mundial de alimentos después de s?lo nueve meses de una producci?n intensiva.

"Invertir en la construcci?n de granjas de algas marinas podr?a prevenir la hambruna global en escenarios de reducci?n abrupta de la luz solar, evitando potencialmente un n?mero significativo de muertes por inanici?n", declar? David Denkenberger, profesor asociado de ingenier?a mec?nica en la Universidad de Canterbury (Reino Unido).

Otro estudio reciente, sin embargo, ofrece una perspectiva diferente sobre el impacto de una guerra nuclear y las nefastas consecuencias para toda la vida en el mundo, incluida la aniquilaci?n de la vida marina.

Los autores simularon los impactos clim?ticos de las guerras nucleares entre Estados Unidos, Rusia e India-Pakist?n y dijeron que el resultado ser?a un enfriamiento global, con el hielo marino apoder?ndose de numerosas comunidades costeras.

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Ejemplar de la 'Gracilaria tikvahiae'
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La recuperaci?n del océano, seg?n ese estudio, ser?a muy lenta: tardar?a décadas en la superficie y cientos de a?os en las regiones m?s profundas, y el plazo alcanzar?a los miles de a?os en aguas m?s fr?as como el ?rtico. Adem?s, los investigadores se?alan que los ecosistemas marinos no s?lo se ver?an profundamente perturbados por el impacto inicial de una guerra nuclear, sino que se deteriorar?an a?n m?s con el nuevo estado del océano, impactando el ecosistema global.

Un manjar nutritivo y saludable

Las algas marinas, que a menudo se comen en ensaladas o como envolturas de alimentos secos, son ricas en prote?nas, minerales, vitaminas, amino?cidos esenciales y ?cidos grasos.

Michael Roleda, profesor de la UP-MSI y coautor del estudio, declar? al portal SciDev.Net que, después de una guerra nuclear, las algas ser?an aptas para el consumo humano. Y ello, a pesar de que absorber?an naturalmente los contaminantes del medio ambiente, pero dichas sustancias t?xicas podr?an reducirse a niveles seguros.

"Por ejemplo, se ha descubierto que el procesamiento poscosecha y la preparaci?n previa al consumo, como el lavado y secado, la reacci?n enzim?tica y el hervido o cocci?n, entre otros, reducen significativamente la concentraci?n de yodo y metales pesados en las algas", manifest?.

Por tanto, la producci?n de algas marinas es un salvavidas para muchas familias que viven en comunidades costeras pobres en pa?ses de bajos ingresos. Estos organismos permanecen protegidos bajo el agua y pueden crecer m?s r?pidamente que cualquier otro cultivo agr?cola conocido.

De hecho, seg?n un informe de 2021 de la Organizaci?n para la Agricultura y la Alimentaci?n, la producci?n de algas cultivadas en Asia represent? el 97% de los 34,7 millones de toneladas producidas en todo el mundo. Adem?s de consumirse como alimento, también se emplean como aditivo alimentario para animales y cosméticos.

Estudio de referencia: https://agupubs.onlinelibrary.wiley....9/2023EF003710

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Contacto de la secci?n de Medio Ambiente: crisisclimatica@prensaiberica.es



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