Alrededor de 9.477.000 personas vieron el ?ltimo debate electoral televisado en la campa?a de las generales de 2019. Hab?a cuatro candidatos: Pedro S?nchez, Pablo Casado, Pablo Iglesias y Albert Rivera. Dos noches antes, la cadena p?blica emiti? el primero de la campa?a y lo siguieron 8.886.000 espectadores. Cuando seis meses después, en noviembre de 2019, se convocaron de nuevo elecciones hubo un tercer debate electoral, esta vez con Santiago Abascal también presente, con 8.632.000 interesados frente a la pantalla. Pero el interés no es de por s? sin?nimo de influencia. Sin embargo, en momentos de incertidumbre como entonces o donde la ola de cambio existe pero los datos no hablan a?n de tsunami, el efecto de la propia campa?a y de los debates electorales se deja notar, sobre todo, "en el movimiento entre los bloques".

"Son muchos millones de personas viendo los debates, es evidente que algo deben influir. Pero uno despierta interés, seis pueden agotar", concluye Ana Salazar, polit?loga y directora de Idus3. Es la misma conclusi?n a la que llega Marta Rebolledo, profesora de Comunicaci?n Pol?tica de la Universidad de Navarra, quien juzga como "desorbitado" el planteamiento realizado por el presidente del Gobierno de tener un cara a cara semanal con Alberto N??ez Feij?o hasta el 23 de julio, adem?s de entender que es "anacr?nico" porque no es representativo de la realidad actual, donde varios partidos nacionales se disputan la representatividad en el Congreso. Pero "si las encuestas dicen que los bloques est?n muy cerca" el efecto del debate es real, asevera.

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La viralizaci?n, clave

Los debates electorales ten?an un aura especial en la década de los 90 y también en la primera década del 2000, pero su influencia era "m?s limitada" porque las opciones de voto también lo eran y el n?mero de indecisos no era tan elevado como se intuye hoy en d?a, coinciden Rebolledo y José Pablo Ferr?ndiz, director de Opini?n P?blica de Ipsos. Hoy en d?a, convienen también ambos, "la decisi?n del voto se retrasa cada vez m?s y la ?ltima semana de la campa?a resulta decisiva en muchos casos desde que vivimos en un sistema multipartidista y donde también hay m?s medios de comunicaci?n para informarse de las diferentes opciones". La influencia que pueden tener los debates, convienen todos ellos, est? en el "incremento de los indecisos" y la "menor lealtad" a las distintas opciones pol?ticas. "El voto es hoy m?s vol?til", pero se mueve, sobre todo, dentro del mismo bloque y es dif?cil que salte a otro; se?ala Rebolledo. "El simple hecho de que se vean distintos partidos influye también en el votante porque se le muestran distintas opciones", a?ade Salazar.

Una campa?a en los plat?s de televisi?n, que es lo que supondr?a la propuesta de un cara a cara semanal por el tiempo que lleva preparar cada uno de ellos, "alejar?a a los candidatos de los actos de calle, dificulta los actos de cercan?a, habr?a menos margen para pisar los territorios y eso no le viene bien a ning?n partido, se?ala Salazar. A los indecisos, sin embargo, se les llega mediante todo lo que acompa?a al debate en s? a través de v?deos, cortes de las intervenciones y mensajes que se trasladan antes y después del debate. Y todo eso, apunta Rebolledo, "afecta a la imagen del candidato, la viralizaci?n de los contenidos hace mucho en la construcci?n de la imagen" y la de S?nchez ha salido perjudicada de las ?ltimas elecciones auton?micas y municipales.

Salazar va m?s all? en su an?lisis. Se produzcan o no los cara a cara, "?quién va a seguir una campa?a en julio? El objetivo de propuestas como esta es que la gente se vaya de vacaciones con el voto ya decidido, tanto los que lo har?n por correo (que por normativa emiten su voto pr?cticamente al inicio de la campa?a) como los que estén en la playa y puedan votar f?sicamente en la urna que les corresponda". Rebolledo también comparte que al PSOE le viene bien tener una campa?a activa desde ya para que el voto quede decidido lo antes posible antes de las vacaciones de mucha gente.

Desmovilizaci?n de la izquierda

Ferr?ndiz se?ala que una de las cosas que se desprende de los an?lisis electorales del 28 de mayo, a falta de un estudio m?s profundo, es que el PSOE tiene a parte de su electorado desmotivado. "Hemos asumido en una primera lectura que se ha desmovilizado la izquierda a la izquierda del PSOE, pero lo cierto es que los socialistas han recibido voto prestado de esta parte del electorado". Por tanto, se?ala, Pedro S?nchez también necesita "movilizar ya a los votantes socialistas" que han preferido quedarse en casa y la propuesta de los cara a cara semanales es una herramienta para hacerlo, adem?s de seguir "desactivando a Yolanda D?az". Busca con esta propuesta que confronten dos proyectos, PSOE y PP, pero el an?lisis que hac?an de las encuestas previas al 28M s? hab?a ganas de Sumar, algo que en este nuevo escenario est? por ver.

Estos debates, apunta el responsable de Ipsos, al PP no le interesan estratégicamente porque tiene a su electorado movilizado, y tanto él como Rebolledo consideran que los cara a cara podr?an "beneficiar m?s a S?nchez", que se ve "m?s ?gil" y est? "m?s acostumbrado" que Feij?o a la esfera nacional, "se ve m?s fuerte" y la propuesta es "reflejo de la pol?tica personalista de S?nchez, él se proyecta como candidato por excelencia y se siente m?s c?modo", remata Rebolledo.



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