Ninguno de los ministros ni diputados socialistas que estuvieron con Pedro S?nchez la ma?ana del miércoles en el Congreso pod?a prever que unas horas después anunciase su intenci?n de meditar sobre su renuncia, tras abrirse una investigaci?n judicial a su esposa, Bego?a G?mez, por tr?fico de influencias. Todos coinciden en destacar que an?micamente lo vieron tocado, incluso “destrozado” por una cuesti?n que le viene afectando notablemente durante las ?ltimas semanas. Lo que considera una campa?a pol?tica de acoso y derribo por parte de la derecha que habr?a traspasado la “l?nea roja” del ?mbito personal. El l?mite de su reconocida resiliencia al saltar la frontera familiar.

Visiblemente afectado y sin saludar a los diputados de su grupo parlamentario como habitualmente hace, S?nchez abandon? la C?mara alta 20 minutos después de iniciarse la sesi?n de control al Gobierno. Solo y nada m?s responder a las preguntas de la oposici?n que iban dirigidas al presidente del Gobierno. Algo que tampoco es costumbre, a no ser que tenga un compromiso en su agenda. No era el caso. Incluso cogi? de improviso a sus escoltas.

Del Congreso se desplaz? directamente al Palacio de La Moncloa donde escribi? personalmente la carta a la ciudadan?a con la que hizo su anuncio pasadas las 19:00 horas. Antes de difundirla, se lo comunic? al rey Felipe VI. A su n?cleo duro le trasmiti? que la decisi?n estaba pr?cticamente tomada. Desde entonces, la consigna en la c?pula del partido y el Gobierno pasa por tratar de convencerlo para que siga al frente de su cargo.

A Moncloa se desplaz? su n?cleo duro, formado por la vicepresidenta primera y vicesecretaria general del PSOE, Mar?a Jes?s Montero, el ministro de Presidencia y Justicia, Félix Bola?os, su jefe de gabinete, ?scar L?pez y el secretario de Organizaci?n del PSOE, Santos Cerd?n. Como ya ocurri? la noche electoral en la que m?s que consultar, S?nchez se limit? a informar m?s que a pedir consejo. El c?nclave se improvis? a iniciativa propia del n?cleo duro, sin que fueran convocados por el presidente del Gobierno. De hecho, ni siquiera se celebr? una reuni?n conjunta entre todos ellos con S?nchez.

Montero calific? este encuentro de una reuni?n “espont?nea”. Seg?n relat? en una entrevista en la ‘Cadena Ser’, se enter? de las intenciones de S?nchez al mismo tiempo en que difund?a la carta a través de las redes sociales. De ah? la decisi?n de reunirse para compartir impresiones y, principalmente, para transmitir un mensaje de “comprensi?n y respeto” a la situaci?n que estar?a atravesando el presidente del Gobierno.

Otras fuentes apuntan a que supieron de sus intenciones momentos antes, con la perspectiva de dimitir, y que le pidieron que se tomase m?s tiempo para reflexionar. Evitar una decisi?n al calor de los acontecimientos, el mismo d?a que se conoci? la informaci?n de que un juzgado de Madrid hab?a abierto diligencias secretas para investigar a su esposa por su supuesta influencia en el rescate p?blico de*Air Europa*y por haber suscrito cartas de recomendaci?n a empresas que ganaron concursos p?blicos.

Sin pasar a otra pantalla

A partir de ese momento, la tarea que se han fijado los socialistas es tratar de lanzar el mensaje que tiene el total respaldo de su organizaci?n y que lo proteger?n de la "campa?a de acoso" que denuncia. Al presidente del Gobierno y su entorno familiar. No se piensa en otra pantalla.

Todos los esfuerzos se concentran en evitar una renuncia con consecuencias org?nicas e institucionales impredecibles. Seg?n subray? la propia vicepresidenta no se habl? de escenarios futuros, en funci?n de la decisi?n del presidente del Gobierno, sino en su situaci?n y en concentrarse en que tome la decisi?n de continuar, aun empatizando con an?micamente todo el mundo tiene un l?mite. “Tenemos que ser claros. No nos puede doblar el pulso la*jaur?a extremista.*Tenemos que*seguir haciendo pol?tica*para la gente”, argumentaba por su parte el ministro de Presidencia y Justicia, Félix Bola?os, en una entrevista a la misma hora en 'Radiocable'.

El comité federal que se celebrar? este s?bado en Ferraz, previsto para ratificar las listas de las europeas, que encabezar? Teresa Ribera, se pretende convertir as? en un foro para transmitir el apoyo de toda la organizaci?n a su secretario general. Por el momento, es todo lo que pueden hacer para intentar persuadir al presidente del Gobierno a la espera de si, como muchos temen, el lunes ratifica su decisi?n de dar un paso al lado.



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