La campa?a electoral dominicana, como tantas otras, se crispa m?s seg?n se acerca el d?a de las votaciones, y el principal candidato, Luis Abinader, se ha visto obligado a salir al paso de acusaciones en redes sociales de diverso jaez. Esta semana, aprovech? la peri?dica rueda de prensa con los periodistas acreditados ante la presidencia de la rep?blica, evento que llaman “la semanal”, para hablar de un fen?meno que suena a los espa?oles. “En estos cinco d?as que faltan para las elecciones, ustedes van a escuchar much?simas m?s fake news…”, advirti?.

La La campa?a electoral dominicana, como tantas otras, se crispa m?s seg?n se acerca el d?a de las votaciones, y el principal candidato, Luis Abinader, se ha visto obligado a salir al paso de acusaciones en redes sociales de diverso jaez. Esta semana, aprovech? la peri?dica rueda de prensa con los periodistas acreditados ante la presidencia de la rep?blica, evento que llaman “la semanal”, para hablar de un fen?meno que suena a los espa?oles. “En estos cinco d?as que faltan para las elecciones, ustedes van a escuchar much?simas m?s fake news…”, advirti?.

La campa?a sube de temperatura, pero el candidato del Partido Revolucionario Moderno (PRM) cuenta con un aparato de apoyo en las redes sociales que, ante las acusaciones que emite la ?rbita conservadora de Leonel Fern?ndez, las ataja con el hagstag #TeConozcoBacalao.

Comparec?a Abinader en “la semanal” cuando una encuesta de Gallup sali? d?ndole el 60% de los sufragios. Entre merengues, bachata y confetti, en v?deos felices de instagram, escuadras de fans y colaboradores a la americana animan los eventos del PRM mostrando su mano derecha con cuatro dedos abiertos y doblado el pulgar, a la manera que ten?an los cuatribarrados posconvergentes en el procés, solo que en Santo Domingo ese gesto no es her?ldica sino llamada al voto: los cuatro dedos por cuatro a?os m?s, la petici?n del presidente.

El mandatario que se somete a la reelecci?n, en comicios que casi son un plebiscito, se llama Luis Rodolfo Abinader Corona. Tiene 56 a?os, es empresario, due?o de Abicor, constructora, cementera y hotelera que sigue la estela fundadora de su padre, y con la que ha amasado una fortuna de 70 millones de d?lares, seg?n la declaraci?n de patrimonio que formaliz? al llegar a la presidencia.

Su historia empresarial es otra de las que por toda Iberoamérirca protagonizan hijos de las numerosas e influyentes colonias de la emigraci?n siria y -en el caso de los Abinader- libanesa.

Asesorado

Antes de agosto de 2020, cuando lleg? al poder, el empresario Abinader era una promesa al que lobistas espa?oles han asesorado en su carrera pol?tica. Entre ellos, José Bono, el expresidente del Congreso, exministro de Defensa y expresidente de Castilla-La Mancha, o el empresario y editor andaluz Manuel Dom?nguez, que es adem?s autor de una elogiosa biograf?a del pol?tico dominicano: "Luis Abinader, una nueva forma de gobernar".

Como un introductor de embajadores, Dom?nguez pase? a Abinader por saraos en Madrid en el a?o de la prepandemia, como los premios de su 'Diario16'. Lo presentaba entonces en la sociedad madrile?a como “el pr?ximo presidente dominicano”.

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La pelea pol?tica en la Rep?blica Dominicana recurre a bulos y descalificaciones contra Pedro S?nchez.
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Fundado en 2014 como una escisi?n del Partido Revolucionario Dominicano, el PRM entr? en solo dos a?os en la Internacional Socialista. El partido de Abinader se declara socialdem?crata. En la nomenclatura de la formaci?n hay un presidente y una secretaria general que no son Abinader. ?l est? en otro cargo, al que en esa estructura le dan otra denominaci?n: “L?der”.

Tanta sinceridad en un escalaf?n puede resultar chocante en Europa, pero no lo es en la tradici?n de un partido que hereda la estela de Hip?lito Mej?a, que también gobern?, y al que sus seguidores llaman “pap?”.

Ahora, este hijo pol?tico del papi Mej?a se encamina a una muy probable reelecci?n. Cuenta con un apoyo notable entre la di?spora dominicana en Estados Unidos y Europa, eso que en Santo Domingo llaman "el voto de ultramar". Y tiene en su haber sonadas obras p?blicas, un bono social al que tildan de clientelista; también la deportaci?n de 175.000 inmigrantes ilegales haitianos, la inflaci?n bajando al 3,03% y el desempleo (en un pa?s con media econom?a sumergida) del 5,4%.

Pero la macroeconom?a no juega bien en la liga de X, TikTok, Facebook e Instagram. En ese campo triunfan los gruesos y chirriantes mensajes de una narrativa que, en esta campa?a, trata de unir la imagen del l?der a la corriente de bulos y estridencias en Espa?a; por ejemplo, perfiles dominicanos moj?ndolo en el caso Koldo; o con esl?ganes como “S?nchez viaj? 33 veces a RD en vuelos secretos…” Al otro lado del Atl?ntico, otra derecha con el Falcon a vueltas.



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