Reem
04-02-2023, 05:30 AM
Jaime de Olano es diputado del PP por Lugo y hace unos d?as recibi? en su despacho del Congreso a un obispo de la Iglesia ortodoxa rumana. Un amigo le llam? y le pidi? que lo recibiera. De Olano reconoce en conversaci?n con EL PERI?DICO DE ESPA?A (https://www.epe.es/es/), del grupo Prensa Ibérica, que justo después de concertar la entrevista se pregunt? qué pod?a hacer un tipo como él por un obispo rumano. El obispo fue al Congreso, se reunieron, le expuso un asunto fiscal relacionado con la religi?n y el diputado popular tom? nota. Y algo muy importante: su se?or?a se enter? de algo de lo que no ten?a ni idea.
Gabriel Rufi?n, portavoz de ERC en la C?mara, est? ahora enfrascado en la campa?a electoral para la alcald?a de Santa Coloma. Por fuerza ha de escuchar y hablar con cientos de ciudadanos. Bueno, por fuerza si quiere aspirar algo, porque si no sale a la calle y palpa el ambiente de los bares, las plazas y los mercados, no le va a ir nada bien. ?l lo hace a menudo, se reivindica.
As? que cuando no se viste de candidato, se viste de diputado, y con el atuendo de diputado por Barcelona, portavoz de ERC y tit?n medi?tico, se fue a la Universidad Carlos III de Madrid hace unos d?as y comparti? unas horas con cerca de 300 estudiantes.
Fue una experiencia que le dio “esperanza”, afirma durante la charla con este medio. Rufi?n es de los que piensa que el discurso y el relato de la extrema derecha est? calando en capas sociales que hace no mucho s?lo cre?an en la izquierda. Lo de que “todos los pol?ticos son iguales” va impregnando los imaginarios de los barrios humildes, en donde la desilusi?n y el escepticismo se convierten en abstenci?n y en votos contra el sistema. “Hay muchos ratones votando a gatos”, comenta. “La derecha no defiende los intereses de la clase trabajadora”, a?ade.
Fue con temor a la universidad, c?mo no ir as? tal y como est? el patio. Pero fue también con respeto. Se encontr? una experiencia m?s que gratificante al final porque not? “conciencia de que se puede cambiar el mundo”. Y de ah? su esperanza.
El portavoz de ERC, como casi todos/as en su grupo, dedican los d?as fuera del Congreso, fuera de Madrid, a implicarse en actos ciudadanos, en seminarios, debates, conferencias, m?tines. Pilar Vallugera, hace aproximadamente un mes, estuvo en Abrera, un municipio barcelonés humilde en el que residen muchos trabajadores y trabajadoras de SEAT. ?De qué hablaron? Vivienda y efectos de la ley del s? es s?, responde.
Precisamente los asuntos que por entonces recorrieron los pasillos del Congreso con m?s fuerza. Los asuntos que m?s volumen metieron al debate pol?tico. ?La m?sica de lo que pasa en el hemiciclo llega fuera? Una decena de diputados y diputadas relata sus impresiones y experiencias.
Lo que se oye en el Congreso y lo que se oye en el bar
Dice Elvira Ram?n, diputada del PSOE por Granada, que “el Congreso no es una burbuja aislada”. “Lo componen personas con los mismos problemas que los dem?s. Pagamos nuestra hipoteca, hacemos la compra, tenemos una vida normal. No somos extraterrestres”, cuenta.
La percepci?n var?a seg?n a quién se pregunte, pues en la pol?tica, como en todo, influye el lugar desde el que se mira. Mirar el ejercicio parlamentario desde la mayor?a que impulsa leyes es una cosa. Mirarlo desde la minor?a que no logra el triunfo de ninguna de sus normas es otra.
Pedro Navarro, diputado del PP por Zaragoza, pieza clave en la campa?a electoral de Jorge Azc?n para la presidencia de Arag?n, lo que le obliga pegarse a la capa emocional de la ciudadan?a, hace una reflexi?n interesante: “La agenda ideol?gica del Gobierno, la inflaci?n, sus consecuencias, todo esto hace que lo que se oye en el Congreso y lo que se oye en el bar se parezcan m?s que nunca”, asegura.
Sara Giménez, representante de Cs por Huesca, se propuso nada m?s sentarse en el esca?o por primera vez que har?a cuanto estuviera en su mano por acercar las inquietudes y peticiones ciudadanas a su rutina.
Tres a?os después, cree que “existe lejan?a entre las necesidades reales de la gente y la labor parlamentaria”. Numerosos debates, agrega, “est?n fuera de las preocupaciones cotidianas de la gente, que son el empleo, llegar a fin de mes, el alquiler…”. No le gustan a Giménez discusiones tan ideol?gicas. Es como si la C?mara se convirtiera en otro planeta. En ocasiones le dicen “a ver si puedes influir m?s, Sara, para que lleguen a acuerdos y se dejen de tonter?as”, seg?n sus palabras.
Mar?a Mu?oz, compa?era de grupo, en declaraciones a EL PERI?DICO DE ESPA?A, es rotunda: “Las preocupaciones sociales son los pol?ticos, la econom?a, la sanidad y la educaci?n. La primera es los pol?ticos porque no hablan de lo que importa y sobre las otras tres… Pues ya me dir?s cu?ntos debates ha habido en el Congreso”.
El relato contra la verdad
Giménez recuerda que en una reuni?n reciente le preguntaron por la esterilizaci?n forzosa en las mujeres, prohibida por ley, y si algo as? era posible en Espa?a hasta hace relativamente poco.
Esto nos lleva a la informaci?n, y a su vez, a los medios de comunicaci?n. El diputado del BNG, Néstor Rego, opina que “los grandes medios se centran las prioridades y las agendas de los tres-cuatro principales partidos a escala estatal”, lo que relega las reivindicaciones de las formaciones peque?as.
El gallego no baja los brazos, mucho menos la voz. Es de los que suele bregar los martes en el Congreso para que sus ruedas de prensa acaparen al menos un poco de atenci?n. No es sencillo. Gracias a las redes, sin embargo, y sobre todo gracias a que trata temas directamente salidos de la realidad de los gallegos, comprueba que “las posiciones del BNG son conocidas en Galicia y muchas veces compartidas”.
No hay discurso que haga en el que no reluzca un problema de su comunidad aut?noma, la profusi?n de torres e?licas, por ejemplo. Quiere Rego regular esto porque el paisaje en Galicia y su propia sociolog?a est?n sufriendo este "boom disparado de lo e?lico".
El diputado Jordi Salvador, de ERC, se muestra m?s escéptico. “A veces, cuando acabo el d?a y repaso lo que dicen los medios y las redes, veo un abismo con lo que he vivido en el Congreso”, advierte. Su tesis invita a la reflexi?n. “Importa m?s el relato que la verdad. Se ve con la reforma laboral", que critica a menudo porque no es una vuelta completa al modelo anterior a la llegada del Gobierno de Mariano Rajoy en 2011-2012.
Ux?a Tiz?n, diputada del PSOE por Ourense, ha sido v?ctima de la desinformaci?n, relata a este medio por escrito. Afirma que las “fake news” est?n en auge, por desgracia, y cuando va a su tierra a informar sobre los logros de su grupo parlamentario y del Gobierno tropieza con “ideas equivocadas” sobre lo hecho o, directamente, con una ignorancia llamativa. Resolverlo es “uno de los temas pendientes”, puntualiza.
Su compa?era de bancada, Elvira Ram?n, coincide. “La gente est? menos informada de lo que pensamos. Me han comentado ‘tenéis que cambiar esto’ cuando el cambio ya est? aprobado”, reflexiona. Para la diputada socialista por Granada, uno de sus principales cometidos es “informar a la ciudadan?a en la calle, de t? a t?”. Tiz?n ahonda: “Es muy importante que cada uno de nosotros y nosotras hagamos pedagog?a en nuestros territorios, en actos a pie de calle”.
Vivir como la gente
También proveniente de Zaragoza, como Navarro, es Noem? Villagrasa. Representa al PSOE. Su visi?n de la conexi?n Parlamento-Realidad es benigna. “A pesar del ruido y del intento de deslegitimar las instituciones y de ridiculizar el Parlamento de la extrema derecha, hay que entender que en el Congreso suceden muchas cosas que afectan al d?a a d?a de las personas y que no les son ajenas”, indica a este medio.
La moci?n de censura de Vox con Ram?n Tamames de candidato, una iniciativa para tumbar al Gobierno que estaba abocada al fracaso desde antes incluso de su registro, es la manifestaci?n m?s reciente de esta controversia sobre la utilidad del Congreso en la vida diaria de Espa?a. Durante dos d?as, la C?mara atraves? un debate que no sirvi? absolutamente para nada, legislativamente hablando.
Efectos pol?ticos s? hubo, sin duda, pero apuntan a la demoscopia y a los sondeos y a c?lculos electorales, que son cosas que no ayudan a la gente a llegar con 100 euros m?s a final de mes ni contribuyen a fortalecer los derechos de las minor?as sociales.
Pero para la mayor?a de los diputados/as consultados, aquello, aun ruidoso y controvertido, fue un tr?mite excepcional y aislado.
Villagrasa rememora aquellos d?as de interlocuci?n frecuente con los agricultores de su pueblo para informarles de los avances de la PAC y, m?s en concreto, de la enmienda que daba amparo a la quema de rastrojos. Rufi?n destaca c?mo se esfuerza, antes de cada discurso, por eliminar “lo farragoso” y recurrir a un lenguaje que la gente entienda. Giménez pide justo esto: palabras inteligibles. De Olano valora el important?simo trabajo de los diputados en las comisiones, ya que facilita especializaci?n e, incluso, anticipaci?n. Y Tiz?n ensalza el “profundo trabajo de escucha a colectivos y a miembros de la sociedad civil que ayudan a conocer de cerca las inquietudes y problemas de los diferentes sectores”.
Trabajar con la gente es fundamental para legislar. Pero éste no es el punto de partida. El punto de partida es vivir con la gente. Vivir como la gente. Dice Villagrasa: “La condici?n de parlamentaria no te quita la de ciudadana, la de militante, la de activista, la de vecina, la de madre. Compro pan en la tienda de siempre y ceno con mis amigos de siempre”.
Como Rufi?n, quien se sigue moviendo por su barrio de chaval y sigue quedando con los amigos y amigas de antes de que fuera un tipo que s?lo necesita unos minutos para que sus tuit sumen 1.000 likes.
No olvidar de d?nde venimos es esencial para saber a d?nde vamos, o suele serlo. Esto, para los diputados, es de m?xima importancia porque, al fin y al cabo, son ellos los que hacen las leyes que nos forman como sociedad.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/nacional/congreso-planeta-lejano-pasa-gente-85514745)
Gabriel Rufi?n, portavoz de ERC en la C?mara, est? ahora enfrascado en la campa?a electoral para la alcald?a de Santa Coloma. Por fuerza ha de escuchar y hablar con cientos de ciudadanos. Bueno, por fuerza si quiere aspirar algo, porque si no sale a la calle y palpa el ambiente de los bares, las plazas y los mercados, no le va a ir nada bien. ?l lo hace a menudo, se reivindica.
As? que cuando no se viste de candidato, se viste de diputado, y con el atuendo de diputado por Barcelona, portavoz de ERC y tit?n medi?tico, se fue a la Universidad Carlos III de Madrid hace unos d?as y comparti? unas horas con cerca de 300 estudiantes.
Fue una experiencia que le dio “esperanza”, afirma durante la charla con este medio. Rufi?n es de los que piensa que el discurso y el relato de la extrema derecha est? calando en capas sociales que hace no mucho s?lo cre?an en la izquierda. Lo de que “todos los pol?ticos son iguales” va impregnando los imaginarios de los barrios humildes, en donde la desilusi?n y el escepticismo se convierten en abstenci?n y en votos contra el sistema. “Hay muchos ratones votando a gatos”, comenta. “La derecha no defiende los intereses de la clase trabajadora”, a?ade.
Fue con temor a la universidad, c?mo no ir as? tal y como est? el patio. Pero fue también con respeto. Se encontr? una experiencia m?s que gratificante al final porque not? “conciencia de que se puede cambiar el mundo”. Y de ah? su esperanza.
El portavoz de ERC, como casi todos/as en su grupo, dedican los d?as fuera del Congreso, fuera de Madrid, a implicarse en actos ciudadanos, en seminarios, debates, conferencias, m?tines. Pilar Vallugera, hace aproximadamente un mes, estuvo en Abrera, un municipio barcelonés humilde en el que residen muchos trabajadores y trabajadoras de SEAT. ?De qué hablaron? Vivienda y efectos de la ley del s? es s?, responde.
Precisamente los asuntos que por entonces recorrieron los pasillos del Congreso con m?s fuerza. Los asuntos que m?s volumen metieron al debate pol?tico. ?La m?sica de lo que pasa en el hemiciclo llega fuera? Una decena de diputados y diputadas relata sus impresiones y experiencias.
Lo que se oye en el Congreso y lo que se oye en el bar
Dice Elvira Ram?n, diputada del PSOE por Granada, que “el Congreso no es una burbuja aislada”. “Lo componen personas con los mismos problemas que los dem?s. Pagamos nuestra hipoteca, hacemos la compra, tenemos una vida normal. No somos extraterrestres”, cuenta.
La percepci?n var?a seg?n a quién se pregunte, pues en la pol?tica, como en todo, influye el lugar desde el que se mira. Mirar el ejercicio parlamentario desde la mayor?a que impulsa leyes es una cosa. Mirarlo desde la minor?a que no logra el triunfo de ninguna de sus normas es otra.
Pedro Navarro, diputado del PP por Zaragoza, pieza clave en la campa?a electoral de Jorge Azc?n para la presidencia de Arag?n, lo que le obliga pegarse a la capa emocional de la ciudadan?a, hace una reflexi?n interesante: “La agenda ideol?gica del Gobierno, la inflaci?n, sus consecuencias, todo esto hace que lo que se oye en el Congreso y lo que se oye en el bar se parezcan m?s que nunca”, asegura.
Sara Giménez, representante de Cs por Huesca, se propuso nada m?s sentarse en el esca?o por primera vez que har?a cuanto estuviera en su mano por acercar las inquietudes y peticiones ciudadanas a su rutina.
Tres a?os después, cree que “existe lejan?a entre las necesidades reales de la gente y la labor parlamentaria”. Numerosos debates, agrega, “est?n fuera de las preocupaciones cotidianas de la gente, que son el empleo, llegar a fin de mes, el alquiler…”. No le gustan a Giménez discusiones tan ideol?gicas. Es como si la C?mara se convirtiera en otro planeta. En ocasiones le dicen “a ver si puedes influir m?s, Sara, para que lleguen a acuerdos y se dejen de tonter?as”, seg?n sus palabras.
Mar?a Mu?oz, compa?era de grupo, en declaraciones a EL PERI?DICO DE ESPA?A, es rotunda: “Las preocupaciones sociales son los pol?ticos, la econom?a, la sanidad y la educaci?n. La primera es los pol?ticos porque no hablan de lo que importa y sobre las otras tres… Pues ya me dir?s cu?ntos debates ha habido en el Congreso”.
El relato contra la verdad
Giménez recuerda que en una reuni?n reciente le preguntaron por la esterilizaci?n forzosa en las mujeres, prohibida por ley, y si algo as? era posible en Espa?a hasta hace relativamente poco.
Esto nos lleva a la informaci?n, y a su vez, a los medios de comunicaci?n. El diputado del BNG, Néstor Rego, opina que “los grandes medios se centran las prioridades y las agendas de los tres-cuatro principales partidos a escala estatal”, lo que relega las reivindicaciones de las formaciones peque?as.
El gallego no baja los brazos, mucho menos la voz. Es de los que suele bregar los martes en el Congreso para que sus ruedas de prensa acaparen al menos un poco de atenci?n. No es sencillo. Gracias a las redes, sin embargo, y sobre todo gracias a que trata temas directamente salidos de la realidad de los gallegos, comprueba que “las posiciones del BNG son conocidas en Galicia y muchas veces compartidas”.
No hay discurso que haga en el que no reluzca un problema de su comunidad aut?noma, la profusi?n de torres e?licas, por ejemplo. Quiere Rego regular esto porque el paisaje en Galicia y su propia sociolog?a est?n sufriendo este "boom disparado de lo e?lico".
El diputado Jordi Salvador, de ERC, se muestra m?s escéptico. “A veces, cuando acabo el d?a y repaso lo que dicen los medios y las redes, veo un abismo con lo que he vivido en el Congreso”, advierte. Su tesis invita a la reflexi?n. “Importa m?s el relato que la verdad. Se ve con la reforma laboral", que critica a menudo porque no es una vuelta completa al modelo anterior a la llegada del Gobierno de Mariano Rajoy en 2011-2012.
Ux?a Tiz?n, diputada del PSOE por Ourense, ha sido v?ctima de la desinformaci?n, relata a este medio por escrito. Afirma que las “fake news” est?n en auge, por desgracia, y cuando va a su tierra a informar sobre los logros de su grupo parlamentario y del Gobierno tropieza con “ideas equivocadas” sobre lo hecho o, directamente, con una ignorancia llamativa. Resolverlo es “uno de los temas pendientes”, puntualiza.
Su compa?era de bancada, Elvira Ram?n, coincide. “La gente est? menos informada de lo que pensamos. Me han comentado ‘tenéis que cambiar esto’ cuando el cambio ya est? aprobado”, reflexiona. Para la diputada socialista por Granada, uno de sus principales cometidos es “informar a la ciudadan?a en la calle, de t? a t?”. Tiz?n ahonda: “Es muy importante que cada uno de nosotros y nosotras hagamos pedagog?a en nuestros territorios, en actos a pie de calle”.
Vivir como la gente
También proveniente de Zaragoza, como Navarro, es Noem? Villagrasa. Representa al PSOE. Su visi?n de la conexi?n Parlamento-Realidad es benigna. “A pesar del ruido y del intento de deslegitimar las instituciones y de ridiculizar el Parlamento de la extrema derecha, hay que entender que en el Congreso suceden muchas cosas que afectan al d?a a d?a de las personas y que no les son ajenas”, indica a este medio.
La moci?n de censura de Vox con Ram?n Tamames de candidato, una iniciativa para tumbar al Gobierno que estaba abocada al fracaso desde antes incluso de su registro, es la manifestaci?n m?s reciente de esta controversia sobre la utilidad del Congreso en la vida diaria de Espa?a. Durante dos d?as, la C?mara atraves? un debate que no sirvi? absolutamente para nada, legislativamente hablando.
Efectos pol?ticos s? hubo, sin duda, pero apuntan a la demoscopia y a los sondeos y a c?lculos electorales, que son cosas que no ayudan a la gente a llegar con 100 euros m?s a final de mes ni contribuyen a fortalecer los derechos de las minor?as sociales.
Pero para la mayor?a de los diputados/as consultados, aquello, aun ruidoso y controvertido, fue un tr?mite excepcional y aislado.
Villagrasa rememora aquellos d?as de interlocuci?n frecuente con los agricultores de su pueblo para informarles de los avances de la PAC y, m?s en concreto, de la enmienda que daba amparo a la quema de rastrojos. Rufi?n destaca c?mo se esfuerza, antes de cada discurso, por eliminar “lo farragoso” y recurrir a un lenguaje que la gente entienda. Giménez pide justo esto: palabras inteligibles. De Olano valora el important?simo trabajo de los diputados en las comisiones, ya que facilita especializaci?n e, incluso, anticipaci?n. Y Tiz?n ensalza el “profundo trabajo de escucha a colectivos y a miembros de la sociedad civil que ayudan a conocer de cerca las inquietudes y problemas de los diferentes sectores”.
Trabajar con la gente es fundamental para legislar. Pero éste no es el punto de partida. El punto de partida es vivir con la gente. Vivir como la gente. Dice Villagrasa: “La condici?n de parlamentaria no te quita la de ciudadana, la de militante, la de activista, la de vecina, la de madre. Compro pan en la tienda de siempre y ceno con mis amigos de siempre”.
Como Rufi?n, quien se sigue moviendo por su barrio de chaval y sigue quedando con los amigos y amigas de antes de que fuera un tipo que s?lo necesita unos minutos para que sus tuit sumen 1.000 likes.
No olvidar de d?nde venimos es esencial para saber a d?nde vamos, o suele serlo. Esto, para los diputados, es de m?xima importancia porque, al fin y al cabo, son ellos los que hacen las leyes que nos forman como sociedad.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/nacional/congreso-planeta-lejano-pasa-gente-85514745)