Reem
03-28-2023, 09:51 AM
Existe un viejo prejuicio seg?n el cual cuando el premio Nobel decide fijarse en un autor siempre llega tarde porque este ya ha dicho de la mejor manera posible todo lo que ten?a que decir, es decir, que sus mejores d?as han quedado atr?s y en consecuencia la producci?n literaria que aparezca después del premio no va a engrandecer particularmente su obra. La supuesta maldici?n del Nobel pill? a Annie Ernaux(Lillebonne, Francia, 1940), ?ltima autora distinguida con el galard?n sueco, en plena actividad, con un libro recién aparecido entonces en las librer?as francesas.*‘El hombre joven’*(ahora en Cabaret Voltaire y Angle)*es una pieza m?s del rompecabezas con el que la autora francesa, de 82 a?os, ha construido una literatura reflexiva y profunda*sobre, lo vivido haciendo m?s evidente que nunca el eslogan de esta cuarta ola feminista en la que estamos insertas: “Lo personal es pol?tico”. Y s?, es la ?ltima obra aparecida antes de que una posible maldici?n se cierna sobre ella.*
Un libro liofilizado
Las novelas de Annie Ernaux, esenciales y descarnadas, suelen ir directamente al hueso pero en ‘El hombre joven’ se supera a s? misma. Este es un libro liofilizado, pura esencia. Apenas 40 p?ginas para relatar uno de sus amores.*El sexo y su significaci?n han sido fundamentales en la literatura de la autora*que ha necesitado valerse de esas historias para hurgar en su experiencia porque, como asegura en 'El hombre joven': “Si no las escribo, las cosas no han llegado a su término, solo las he vivido”. Utilizados por la autora para alcanzar esa plenitud, sus amantes, muy sexualizados, jalonan su escritura.*“A menudo he hecho el amor para obligarme a escribir”,*precisa aqu?. Ah? est?n, entre otros, el diplom?tico ruso ‘partenaire’ -15 a?os m?s joven que ella- de una de sus mejores novelas, ‘Pura pasi?n’, y del texto ‘Perderse’ que explora la misma relaci?n desde sus diarios. Y también, ya en el siglo XXI, el fot?grafo Marc Marie, 22 a?os menor, con el que comparti? adem?s el seguimiento fotogr?fico de un c?ncer de pecho hoy superado.*
https://www.aglitk.com/clip/ff93c01b-4455-42bf-bced-a40f0bbe4ef5_16-9-aspect-ratio_default_0.jpg Annie Ernaux, en los a?os 90. |
'El hombre joven' nace colateralmente del encargo de la revista*‘Cahiers de L’Herne’*de dedicarle uno de sus prestigiosos n?meros monogr?ficos, que suelen recoger textos cr?ticos de especialistas e inéditos del escritor en cuesti?n. Ernaux encontr? entre sus papeles una*primera versi?n de esta 'nouvelle' escrita originalmente en 1998, relatando unos sucesos que entonces ten?a muy cercanos: la relaci?n que mantuvo, cuando ella ten?a 54 a?os, con un joven estudiante de 25. Casi 30 a?os les separaban. Y s?, de todos sus textos amorosos, ‘El hombre joven’ es posiblemente el que mejor expresa el verdadero significado de esta diferencia de edad, concebida no como un simplista “me siento rejuvener” sino como un profundo ejercicio de memoria. “El problema principal de esta novela -explic? la autora en su momento a la emisora de radio France Culture- es que me enfrento a ella viva y muerta a la vez. Viva, porque efectivamente fue una relaci?n amorosa muy intensa y muerta porque me hizo revivir muchas cosas de mi pasado”.*
Espejo de juventud
Aprecia Ernaux muchos de estos aspectos. Que la relaci?n con el muchacho ocurri? en*Ruan,*la ciudad en la que la propia autora también estudi? filolog?a. Que el chico titular pasa*apuros econ?micos y tiene una extracci?n social baja, como fue el caso de Ernaux, lo que se evidencia en un piso de estudiante apenas calefaccionado, con el colch?n en el suelo, y eso dispara el recuerdo de sus a?os de estudiante y la precariedad de sus primeros a?os de matrimonio. Y de nuevo, encontramos el sentimiento de culpa por su*desclasamiento social*puesto que Ernaux, financiando las escapadas que ambos hicieron juntos, estableciendo “una posici?n dominante”, se siente una ‘burguesa’ al lado del chico.
Pero hay m?s. Desde la ventana de aquel peque?o apartamento, la madura Ernaux de finales de los 90, ve el Hospital donde en 1964*ella misma, estudiante de filolog?a, fue internada durante una semana a consecuencia de un aborto clandestino y esas vistas le sirvieron, como cuenta, de disparadero a la memoria. Poco después ya separada del muchacho escribir?*‘El acontecimiento’, una de sus obras mayores.
Significativa es también la manera en la que Ernaux dice vivir esa relaci?n con alguien que “podr?a ser su hijo”; de hecho, ella ten?a dos hijos de esa edad entonces. La forma en la que, pese a la dificultad, no se esconde y siente absurdo desde la verdad de la relaci?n el reproche de los amigos del muchacho:*“?C?mo puedes salir con una menopa?sica?”. La idea de maternidad y su opuesto se filtran, ambivalentes, en el texto mientras la autora fantaseaba con la loca idea de volver a tener hijos. Como siempre Ernaux excava en sus contradicciones y vuelve a facturar un texto que -ha dicho-, mucho m?s que cualquier otra obra suya, es “un precipitado de todo lo que es importante” en sus libros.*
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/cultura/nuevo-libro-annie-ernaux-hombre-joven-85277290)
Un libro liofilizado
Las novelas de Annie Ernaux, esenciales y descarnadas, suelen ir directamente al hueso pero en ‘El hombre joven’ se supera a s? misma. Este es un libro liofilizado, pura esencia. Apenas 40 p?ginas para relatar uno de sus amores.*El sexo y su significaci?n han sido fundamentales en la literatura de la autora*que ha necesitado valerse de esas historias para hurgar en su experiencia porque, como asegura en 'El hombre joven': “Si no las escribo, las cosas no han llegado a su término, solo las he vivido”. Utilizados por la autora para alcanzar esa plenitud, sus amantes, muy sexualizados, jalonan su escritura.*“A menudo he hecho el amor para obligarme a escribir”,*precisa aqu?. Ah? est?n, entre otros, el diplom?tico ruso ‘partenaire’ -15 a?os m?s joven que ella- de una de sus mejores novelas, ‘Pura pasi?n’, y del texto ‘Perderse’ que explora la misma relaci?n desde sus diarios. Y también, ya en el siglo XXI, el fot?grafo Marc Marie, 22 a?os menor, con el que comparti? adem?s el seguimiento fotogr?fico de un c?ncer de pecho hoy superado.*
https://www.aglitk.com/clip/ff93c01b-4455-42bf-bced-a40f0bbe4ef5_16-9-aspect-ratio_default_0.jpg Annie Ernaux, en los a?os 90. |
'El hombre joven' nace colateralmente del encargo de la revista*‘Cahiers de L’Herne’*de dedicarle uno de sus prestigiosos n?meros monogr?ficos, que suelen recoger textos cr?ticos de especialistas e inéditos del escritor en cuesti?n. Ernaux encontr? entre sus papeles una*primera versi?n de esta 'nouvelle' escrita originalmente en 1998, relatando unos sucesos que entonces ten?a muy cercanos: la relaci?n que mantuvo, cuando ella ten?a 54 a?os, con un joven estudiante de 25. Casi 30 a?os les separaban. Y s?, de todos sus textos amorosos, ‘El hombre joven’ es posiblemente el que mejor expresa el verdadero significado de esta diferencia de edad, concebida no como un simplista “me siento rejuvener” sino como un profundo ejercicio de memoria. “El problema principal de esta novela -explic? la autora en su momento a la emisora de radio France Culture- es que me enfrento a ella viva y muerta a la vez. Viva, porque efectivamente fue una relaci?n amorosa muy intensa y muerta porque me hizo revivir muchas cosas de mi pasado”.*
Espejo de juventud
Aprecia Ernaux muchos de estos aspectos. Que la relaci?n con el muchacho ocurri? en*Ruan,*la ciudad en la que la propia autora también estudi? filolog?a. Que el chico titular pasa*apuros econ?micos y tiene una extracci?n social baja, como fue el caso de Ernaux, lo que se evidencia en un piso de estudiante apenas calefaccionado, con el colch?n en el suelo, y eso dispara el recuerdo de sus a?os de estudiante y la precariedad de sus primeros a?os de matrimonio. Y de nuevo, encontramos el sentimiento de culpa por su*desclasamiento social*puesto que Ernaux, financiando las escapadas que ambos hicieron juntos, estableciendo “una posici?n dominante”, se siente una ‘burguesa’ al lado del chico.
Pero hay m?s. Desde la ventana de aquel peque?o apartamento, la madura Ernaux de finales de los 90, ve el Hospital donde en 1964*ella misma, estudiante de filolog?a, fue internada durante una semana a consecuencia de un aborto clandestino y esas vistas le sirvieron, como cuenta, de disparadero a la memoria. Poco después ya separada del muchacho escribir?*‘El acontecimiento’, una de sus obras mayores.
Significativa es también la manera en la que Ernaux dice vivir esa relaci?n con alguien que “podr?a ser su hijo”; de hecho, ella ten?a dos hijos de esa edad entonces. La forma en la que, pese a la dificultad, no se esconde y siente absurdo desde la verdad de la relaci?n el reproche de los amigos del muchacho:*“?C?mo puedes salir con una menopa?sica?”. La idea de maternidad y su opuesto se filtran, ambivalentes, en el texto mientras la autora fantaseaba con la loca idea de volver a tener hijos. Como siempre Ernaux excava en sus contradicciones y vuelve a facturar un texto que -ha dicho-, mucho m?s que cualquier otra obra suya, es “un precipitado de todo lo que es importante” en sus libros.*
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