Reem
03-15-2023, 08:29 AM
El 23 de noviembre de 1995, m?s de dos décadas después de la muerte del dictador, fue derogada la*Ley sobre peligrosidad y rehabilitaci?n social. Aprobada en 1970, esta norma se reafirmaba en la persecuci?n a los homosexuales establecida en la modificaci?n introducida el 15 de julio de 1954 en la*Ley de Vagos y Maleantes, la cual contemplaba expresamente la detenci?n e internamiento en instituciones especiales a los 'homoxesuales'. S?, como lo leen, 'homoxesuales'.
A pesar de lo bochornoso de la errata, el error no impidi? que, durante décadas, las personas con sexualidades no normativas fueran perseguidas por las autoridades franquistas, hasta el punto de tener que ocultar su identidad sexual a amigos, familiares y, por supuesto, a funcionarios p?blicos, jefes o compa?eros de trabajo.
Obligados a continuar con su vida en esa coyuntura,*los homosexuales buscaron sectores profesionales donde su condici?n sexual no despertase tantos recelos.*Uno de los m?s acogedores, por no decir el ?nico, fue el mundo del espect?culo que, en el primer tercio del siglo XX, hab?a sumado a la tradici?n teatral nuevas industrias, como la discogr?fica y la cinematogr?fica, en las que ten?an cabida compositores, letristas, decoradores, actores, libretistas, cartelistas, pintores o dise?adores de vestuario. A través de esas disciplinas, estos creadores intentaron expresar sus gustos culturales y opciones sexuales hasta donde permit?an las leyes, la censura y la aceptaci?n social.
"Cuando en el a?o 1949*Antonio Mas-Guindal*escribi? el guion de su debut en el cine, incluy? una escena en la que mor?a un personaje que era chapero. Si poner a un chapero en esa época era ya algo muy llamativo, mientras agonizaba, el personaje citaba a*Oscar Wilde. En el caso de*El ?ltimo cuplé*de 1956, en uno de los guiones encontré que hab?a*una secuencia entera protagonizada por un travesti.*Se trataba de un personaje que sale con mantones de Manila que se va quitando y el p?blico, formado por hombres que se han excitado viéndole actuar, se termina dando cuenta de que es un hombre. La escena fue eliminada del guion definitivo pero, por lo menos, los guionistas intentaron incluirla", explica*Santiago Lomas Mart?nez, autor de*Creadores queer en el cine espa?ol del franquismo: subcultura homosexual y género, un ensayo publicado por la*editorial Laertes*y que este miércoles ser? presentado en el*Cine Doré*con una sesi?n especial.
"Utilizo el concepto*queer*de forma retroactiva porque, ?c?mo reflejar la complejidad de esta disidencia sexual o de género para estudiar identidades disidentes en el pasado? Durante el franquismo la sexualidad era una cuesti?n binaria, heterosexual u homosexual, pero ahora, ?todo lo que podemos considerar*queer*se puede también denominar homosexual? ?D?nde empieza y acaba la homosexualidad? ?Es homosexual quien desea a hombres pero no tiene relaciones sexuales con ellos?, ?y quien s? las tiene pero se identifica como heterosexual? Aunque pueda resultar raro a priori, la idea de lo*queer*sirve mejor para reflejar un abanico de posibilidades dentro de la cultura, como aspectos estéticos, identificaciones, predilecci?n por unas narrativas y no otras… En definitiva, realidades que van m?s all? de lo que podr?amos pensar de entrada solo como homosexualidad y a las que aplicar este adjetivo tal vez sea un paso demasiado grande. Por eso,*m?s que caer en el blanco y en el negro, en el A o B, creo que tiene m?s sentido hablar de*queer*como desviado de la norma, divergente o con miradas diferentes".
A pesar de recurrir a un concepto tan contempor?neo y amplio como lo*queer, lo cierto es que la mayor parte de los profesionales mencionados en el ensayo de Santiago Lomas Mart?nez fueron hombres homosexuales. No obstante, se?ala, y aunque solo sea por cuestiones estad?sticas, en la Espa?a del franquismo y m?s concretamente en el mundo del cine, también tuvo que haber personas trans o lesbianas.
https://www.aglitk.com/clip/4814b452-a05e-47e7-a7c6-e9efd8d63735_16-9-aspect-ratio_default_0.jpg Cartel de 'Casa Flora'. |
"Cuando hablamos de sexualidad, cultura e identidades nos pensamos en virtud de los discursos culturales que tenemos disponibles. Ahora hablamos de personas trans, pero en los a?os 50 y 60 las personas trans no eran capaces de pensarse como tales porque no ten?an acceso a esos discursos. Tal vez se sent?an diferentes, pero se pensaban utilizando otras ideas que s? pod?an estar disponibles, como el tercer sexo o cuestiones as?.*A partir de los a?os 70 surgen cambios en esa terminolog?a. Se empieza a utilizar travesti, luego transexual y m?s adelante aparecer? transgénero.*En el caso de las mujeres lesbianas, lo que sucede es que las mujeres en el franquismo ten?an muy dif?cil acceder a determinados cargos de responsabilidad creativa. Por ello, no es que el libro niegue la posibilidad de que haya habido personas trans o lesbianas en el cine del franquismo, pero en la medida en que los hombres ten?an m?s acceso a los medios de producci?n, es l?gico que tuvieran m?s presencia. De hecho, incluso los hombres gais ten?an a mano discursos poco elaborados, como los inversionistas, que afirmaban que el gay no era del todo un hombre sino que ten?a una parte de mujer".
Divas dolientes
Uno de los géneros favoritos de los creadores*queer*durante el franquismo fueron los melodramas y los musicales, protagonizados por personajes femeninos atormentados que, a diferencia de lo sucedido con los an?lisis de la obra de autores como*Tennessee Williams, no se trataba de gays disfrazados.
"La utilizaci?n de personajes femeninos por parte de estos creadores les permite ubicar a los hombres en la posici?n de objeto de deseo y, adem?s, abordar tem?ticas como la dificultad de la realizaci?n de ese deseo mejor que si empleasen, por ejemplo, personajes hombres en un contexto bélico. Cuando*Juan de Ordu?a*rueda un cierto tipo de melodramas o*Rafael de Le?n*escribe ciertas letras para las coplas, no es que la Parrala sea un hombre gay, sino que es una mujer que le sirve al autor para hablar de experiencias que le son m?s cercanas que las que tendr?a un héroe masculino convencional. De hecho, esas continuidades se pueden ver hoy en autores como*Almod?var*o*los Javis. Cuando estos creadores cuentan historias de mujeres, no est?n presentando gays disfrazados, sino optando por unos personajes femeninos que permiten unas posibilidades expresivas que exceden determinados c?digos de la masculinidad", explica Lomas Mart?nez.
Durante el franquismo, para poder desarrollar su trabajo sin complicaciones, los creadores*queer*debieron ser prudentes en lo que a visibilizar su identidad se refiere. Si bien en su c?rculo cercano e incluso sus compa?eros del mundo del espect?culo pod?an conocer su sexualidad, era imprescindible que no trascendiera a la esfera p?blica. Incluso cuando se pod?a intuir o era casi un secreto a voces, hab?a que aparentar estar dentro de la norma.
https://www.aglitk.com/clip/53e1bb4a-455b-4e79-9fae-9067d5a621de_16-9-aspect-ratio_default_0.jpg Juan de Ordu?a (izda.) dirige a Sara Montiel (centro) y Aurora Bautista en 'Locura de amor' (1948). |
"En el caso de estos creadores era muy importante la combinaci?n entre visibilidad y utilidad. A finales de los a?os 40, Juan de Ordu?a, por ejemplo, fue uno de los creadores que mejor conectaba con el p?blico. Aunque no tenemos datos de taquilla, se conocen los d?as de permanencia en cartel y pel?culas como*Locura de amor*o*Agustina de Arag?n*tuvieron un gran éxito. Eso hizo que Ordu?a se convirtiera en una figura tan ?til para la industria, que se le permit?a trabajar sin demasiadas complicaciones. Tanto es as? que, en el caso de la pel?cula*Alba de América, que era un proyecto oficial del régimen, desde Cifesa se impuso que fuera Ordu?a el que la dirigiera porque era el director m?s popular. Adem?s, aunque podr?a desviarse en lo que se refiere a cuestiones de género y sexuales, en Ordu?a nunca hay una cr?tica pol?tica frontal y ten?a mucho cuidado con los finales.*A la censura lo que m?s le preocupaba eran los finales porque es el final lo que estabiliza la ideolog?a de la pel?cula.*La gente, cuando se iba de la sala, ten?a que irse sabiendo quién era el bueno y quién el malo que hab?a sido castigado. Por eso los finales de estas narrativas casi siempre son conservadores y nunca premian la transgresi?n".
https://www.aglitk.com/clip/8f106bd4-8cd4-43e6-ba11-d4a7516d1933_16-9-aspect-ratio_default_0.jpg Libro de Santiago Lomas Mart?nez. |
Del melodrama 'queer' a la sicalipsis 'camp'
Creadores queer en el cine espa?ol del franquismo (https://www.epe.es/es/cultura/20230315/cine-lgtbiq-franquismo-censura-84630368) se presentar? este miércoles a las 20 horas en el Cine Doré de Filmoteca Espa?ola, con una sesi?n especial en la que se proyectar? El balc?n de la luna, pel?cula de Luis Saslavsky rodada en 1962. Protagonizada por Lola Flores, Carmen Sevilla y Paquita Rico, esta cinta es, en opini?n de Santiago Lomas Mart?nez, un punto de inflexi?n en esa tradici?n expresiva queer.
"A partir del a?o 62, El balc?n de la luna y otras pel?culas que aparecen después van recuperando la tradici?n de lo camp, que ya exist?a antes del franquismo desde la época del cuplé. En ese sentido, El balc?n de la luna es muy interesante porque funciona como bisagra entre el melodrama o las divas frustradas que sufren y ese mundo camp caracterizado por la frivolidad, el exceso, la iron?a, la pluma y los dobles sentidos sobre deseo sexual y que ser? m?s evidente en pel?culas como Casa Flora, en la que Lola Flores canta directamente A m? me gustan los hombres. Esas pel?culas ya no est?n en el terreno del Juan de Ordu?a de los a?os 40, sino en la antesala de esa cultura queer abierta que vamos a ver a partir de la Transici?n y que, por otra parte, adelanta lo que posteriormente har?n autores como Terenci Moix en la literatura o Pedro Almod?var en el cine".
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/gente/cine-franquismo-queer-84666044)
A pesar de lo bochornoso de la errata, el error no impidi? que, durante décadas, las personas con sexualidades no normativas fueran perseguidas por las autoridades franquistas, hasta el punto de tener que ocultar su identidad sexual a amigos, familiares y, por supuesto, a funcionarios p?blicos, jefes o compa?eros de trabajo.
Obligados a continuar con su vida en esa coyuntura,*los homosexuales buscaron sectores profesionales donde su condici?n sexual no despertase tantos recelos.*Uno de los m?s acogedores, por no decir el ?nico, fue el mundo del espect?culo que, en el primer tercio del siglo XX, hab?a sumado a la tradici?n teatral nuevas industrias, como la discogr?fica y la cinematogr?fica, en las que ten?an cabida compositores, letristas, decoradores, actores, libretistas, cartelistas, pintores o dise?adores de vestuario. A través de esas disciplinas, estos creadores intentaron expresar sus gustos culturales y opciones sexuales hasta donde permit?an las leyes, la censura y la aceptaci?n social.
"Cuando en el a?o 1949*Antonio Mas-Guindal*escribi? el guion de su debut en el cine, incluy? una escena en la que mor?a un personaje que era chapero. Si poner a un chapero en esa época era ya algo muy llamativo, mientras agonizaba, el personaje citaba a*Oscar Wilde. En el caso de*El ?ltimo cuplé*de 1956, en uno de los guiones encontré que hab?a*una secuencia entera protagonizada por un travesti.*Se trataba de un personaje que sale con mantones de Manila que se va quitando y el p?blico, formado por hombres que se han excitado viéndole actuar, se termina dando cuenta de que es un hombre. La escena fue eliminada del guion definitivo pero, por lo menos, los guionistas intentaron incluirla", explica*Santiago Lomas Mart?nez, autor de*Creadores queer en el cine espa?ol del franquismo: subcultura homosexual y género, un ensayo publicado por la*editorial Laertes*y que este miércoles ser? presentado en el*Cine Doré*con una sesi?n especial.
"Utilizo el concepto*queer*de forma retroactiva porque, ?c?mo reflejar la complejidad de esta disidencia sexual o de género para estudiar identidades disidentes en el pasado? Durante el franquismo la sexualidad era una cuesti?n binaria, heterosexual u homosexual, pero ahora, ?todo lo que podemos considerar*queer*se puede también denominar homosexual? ?D?nde empieza y acaba la homosexualidad? ?Es homosexual quien desea a hombres pero no tiene relaciones sexuales con ellos?, ?y quien s? las tiene pero se identifica como heterosexual? Aunque pueda resultar raro a priori, la idea de lo*queer*sirve mejor para reflejar un abanico de posibilidades dentro de la cultura, como aspectos estéticos, identificaciones, predilecci?n por unas narrativas y no otras… En definitiva, realidades que van m?s all? de lo que podr?amos pensar de entrada solo como homosexualidad y a las que aplicar este adjetivo tal vez sea un paso demasiado grande. Por eso,*m?s que caer en el blanco y en el negro, en el A o B, creo que tiene m?s sentido hablar de*queer*como desviado de la norma, divergente o con miradas diferentes".
A pesar de recurrir a un concepto tan contempor?neo y amplio como lo*queer, lo cierto es que la mayor parte de los profesionales mencionados en el ensayo de Santiago Lomas Mart?nez fueron hombres homosexuales. No obstante, se?ala, y aunque solo sea por cuestiones estad?sticas, en la Espa?a del franquismo y m?s concretamente en el mundo del cine, también tuvo que haber personas trans o lesbianas.
https://www.aglitk.com/clip/4814b452-a05e-47e7-a7c6-e9efd8d63735_16-9-aspect-ratio_default_0.jpg Cartel de 'Casa Flora'. |
"Cuando hablamos de sexualidad, cultura e identidades nos pensamos en virtud de los discursos culturales que tenemos disponibles. Ahora hablamos de personas trans, pero en los a?os 50 y 60 las personas trans no eran capaces de pensarse como tales porque no ten?an acceso a esos discursos. Tal vez se sent?an diferentes, pero se pensaban utilizando otras ideas que s? pod?an estar disponibles, como el tercer sexo o cuestiones as?.*A partir de los a?os 70 surgen cambios en esa terminolog?a. Se empieza a utilizar travesti, luego transexual y m?s adelante aparecer? transgénero.*En el caso de las mujeres lesbianas, lo que sucede es que las mujeres en el franquismo ten?an muy dif?cil acceder a determinados cargos de responsabilidad creativa. Por ello, no es que el libro niegue la posibilidad de que haya habido personas trans o lesbianas en el cine del franquismo, pero en la medida en que los hombres ten?an m?s acceso a los medios de producci?n, es l?gico que tuvieran m?s presencia. De hecho, incluso los hombres gais ten?an a mano discursos poco elaborados, como los inversionistas, que afirmaban que el gay no era del todo un hombre sino que ten?a una parte de mujer".
Divas dolientes
Uno de los géneros favoritos de los creadores*queer*durante el franquismo fueron los melodramas y los musicales, protagonizados por personajes femeninos atormentados que, a diferencia de lo sucedido con los an?lisis de la obra de autores como*Tennessee Williams, no se trataba de gays disfrazados.
"La utilizaci?n de personajes femeninos por parte de estos creadores les permite ubicar a los hombres en la posici?n de objeto de deseo y, adem?s, abordar tem?ticas como la dificultad de la realizaci?n de ese deseo mejor que si empleasen, por ejemplo, personajes hombres en un contexto bélico. Cuando*Juan de Ordu?a*rueda un cierto tipo de melodramas o*Rafael de Le?n*escribe ciertas letras para las coplas, no es que la Parrala sea un hombre gay, sino que es una mujer que le sirve al autor para hablar de experiencias que le son m?s cercanas que las que tendr?a un héroe masculino convencional. De hecho, esas continuidades se pueden ver hoy en autores como*Almod?var*o*los Javis. Cuando estos creadores cuentan historias de mujeres, no est?n presentando gays disfrazados, sino optando por unos personajes femeninos que permiten unas posibilidades expresivas que exceden determinados c?digos de la masculinidad", explica Lomas Mart?nez.
Durante el franquismo, para poder desarrollar su trabajo sin complicaciones, los creadores*queer*debieron ser prudentes en lo que a visibilizar su identidad se refiere. Si bien en su c?rculo cercano e incluso sus compa?eros del mundo del espect?culo pod?an conocer su sexualidad, era imprescindible que no trascendiera a la esfera p?blica. Incluso cuando se pod?a intuir o era casi un secreto a voces, hab?a que aparentar estar dentro de la norma.
https://www.aglitk.com/clip/53e1bb4a-455b-4e79-9fae-9067d5a621de_16-9-aspect-ratio_default_0.jpg Juan de Ordu?a (izda.) dirige a Sara Montiel (centro) y Aurora Bautista en 'Locura de amor' (1948). |
"En el caso de estos creadores era muy importante la combinaci?n entre visibilidad y utilidad. A finales de los a?os 40, Juan de Ordu?a, por ejemplo, fue uno de los creadores que mejor conectaba con el p?blico. Aunque no tenemos datos de taquilla, se conocen los d?as de permanencia en cartel y pel?culas como*Locura de amor*o*Agustina de Arag?n*tuvieron un gran éxito. Eso hizo que Ordu?a se convirtiera en una figura tan ?til para la industria, que se le permit?a trabajar sin demasiadas complicaciones. Tanto es as? que, en el caso de la pel?cula*Alba de América, que era un proyecto oficial del régimen, desde Cifesa se impuso que fuera Ordu?a el que la dirigiera porque era el director m?s popular. Adem?s, aunque podr?a desviarse en lo que se refiere a cuestiones de género y sexuales, en Ordu?a nunca hay una cr?tica pol?tica frontal y ten?a mucho cuidado con los finales.*A la censura lo que m?s le preocupaba eran los finales porque es el final lo que estabiliza la ideolog?a de la pel?cula.*La gente, cuando se iba de la sala, ten?a que irse sabiendo quién era el bueno y quién el malo que hab?a sido castigado. Por eso los finales de estas narrativas casi siempre son conservadores y nunca premian la transgresi?n".
https://www.aglitk.com/clip/8f106bd4-8cd4-43e6-ba11-d4a7516d1933_16-9-aspect-ratio_default_0.jpg Libro de Santiago Lomas Mart?nez. |
Del melodrama 'queer' a la sicalipsis 'camp'
Creadores queer en el cine espa?ol del franquismo (https://www.epe.es/es/cultura/20230315/cine-lgtbiq-franquismo-censura-84630368) se presentar? este miércoles a las 20 horas en el Cine Doré de Filmoteca Espa?ola, con una sesi?n especial en la que se proyectar? El balc?n de la luna, pel?cula de Luis Saslavsky rodada en 1962. Protagonizada por Lola Flores, Carmen Sevilla y Paquita Rico, esta cinta es, en opini?n de Santiago Lomas Mart?nez, un punto de inflexi?n en esa tradici?n expresiva queer.
"A partir del a?o 62, El balc?n de la luna y otras pel?culas que aparecen después van recuperando la tradici?n de lo camp, que ya exist?a antes del franquismo desde la época del cuplé. En ese sentido, El balc?n de la luna es muy interesante porque funciona como bisagra entre el melodrama o las divas frustradas que sufren y ese mundo camp caracterizado por la frivolidad, el exceso, la iron?a, la pluma y los dobles sentidos sobre deseo sexual y que ser? m?s evidente en pel?culas como Casa Flora, en la que Lola Flores canta directamente A m? me gustan los hombres. Esas pel?culas ya no est?n en el terreno del Juan de Ordu?a de los a?os 40, sino en la antesala de esa cultura queer abierta que vamos a ver a partir de la Transici?n y que, por otra parte, adelanta lo que posteriormente har?n autores como Terenci Moix en la literatura o Pedro Almod?var en el cine".
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/gente/cine-franquismo-queer-84666044)