Reem
03-12-2023, 05:23 PM
El aspecto de la represa del r?o Oskil impresiona. Una neblina gruesa entinta de gris un escenario que parece apocal?ptico. El complejo hidroeléctrico ha sido reventado, est? partido en dos, las esclusas han ca?do al agua y unas aguas nerviosas contornean abajo el gigantesco amasijo de hormig?n y hierros retorcidos que sol?a unir las dos orillas. Por aqu?, hasta el repliegue ruso de finales del verano pasado, se desarrollaron atroces enfrentamientos. Ahora en algunas zonas el punto de contacto con el r?o es menos cercana pero en otras el Oskil todav?a hace de barrera natural entre las ?reas bajo control ruso y donde est?n las tropas ucranianas, donde los combates siguen intensos.Cruzar los r?os sigue siendo, seg?n diversos expertos militares, un reto en las ofensivas y contraofensivas en Ucrania para rusos y ucranianos, ya que los canales fluviales pueden complicar el paso de mecanizados y acorazados cuando los puentes son destruidos y los caudales son abundantes. En el Oskil, la naturaleza herida es testigo de ello. La represa ha sido volada durante el repliegue ruso, los bosques cercanos est?n ennegrecidos por el fuego y las orillas est?n minadas. Un diminuto cartel rojo, con una calavera blanca, lo advierte.
El pescador Oleg Borisovich se trepa entre los escombros, esquiva un cr?ter sin miedo a caer al agua, y sacude la cabeza desde uno de los puntos m?s altos de lo que queda de la represa. Cuando a?n exist?a la Uni?n Soviética era ge?logo y conoce cada rinc?n de estas aguas en las que viven lucios, carpas y besugos. “Antes de la guerra, pesqué aqu? uno de 50 kilogramos”, dice con orgullo, al saludar a otro de los pescadores que, enfundado en un chubasquero amarillo, sigue acudiendo al lugar. Hoy, en verdad, la pesca tampoco ha ido mal.
Frenar los rusos
Desde que la presa ya no funciona, el nivel del agua ha subido, hay peces donde no hab?a y el bot?n no casi nunca decepciona a los que, en tiempos de estrecheces, prefieren vivir de lo que entrega el r?o que de enlatados. Pero a Borisovich esto también le preocupa. “He visto estos r?os desde peque?o; es triste ver c?mo los hombres les hemos hecho cortes de manga. Primero la crisis clim?tica y ahora esta guerra lo est?n perturbando todo”, se lamenta. “Esta represa fue construida porque el r?o Oskil, que nace en Rusia, forma parte de un sistema que, junto con el Donets, se usaba para abastecer a algunas ciudades y empresas de Donetsk”, explica. “Pero en términos militares, este r?o ha sido, y es, una barrera para ambos bandos”, razona.
A unos 15 kil?metros de distancia, Maksim Strelmilov, oficial de la administraci?n regional de la cercana Izium, retomada por Ucrania en las mismas semanas, también explica c?mo el r?o que atraviesa la ciudad, el Donets, fren? el avance de las tropas rusas en los primeros meses de la invasi?n. “No pudieron atravesarlo r?pidamente y as? asediar a los batallones ucranianos en el Donb?s”, asegura este funcionario, de pie delante de un puente de pontones colocado por Ucrania durante su contraofensiva y ahora abandonado y hundido en las gélidas y heladas aguas del r?o.
“El Donets divide el norte y sur de la ciudad de Izium. Los rusos lograron capturar la parte norte el 7 de marzo, pero tardaron m?s de un mes en atravesar el Donets. La naturaleza nos ayud?”, contin?a Strelmilov. “Este es uno de los r?os m?s grandes de Ucrania. Tiene un canal muy ancho, en algunos lugares la profundidad llega hasta los 5 metros. El lugar donde ahora estamos sol?a ser una playa de la ciudad, donde descansaban ni?os, turistas y lugare?os. En este lugar la profundidad es de 1,5 metros”, explica.
El Bug Meridional y el Dniéper
Seg?n Strelmilov, las tropas rusas pudieron finalmente tomar toda la ciudad solo después de que algunos colaboradores (ciudadanos ucranianos que ayudan a las fuerzas rusas) le mostraran “otro punto” por el que cruzar. “De esta manera, el 1 de abril pudieron ocupar la ciudad”, dice. A?n as?, el tiempo perdido "impidi? el cerco de los soldados que estaban en las regiones de Donetsk y Lugansk, que eran las unidades m?s preparadas en ese momento. Y cuando tomaron Izium el ejército ucraniano ya hab?a construido una l?nea de defensa en direcci?n de Sloviansk”, a?ade.
El Donets y el Oskil no son los ?nicos r?os considerados estratégicos en la guerra de Ucrania, por la dificultad que existe en atravesarlos en seguridad, es decir, sin que el enemigo se entere. Otro ejemplo es el de Bug Meridional, que se temi? que las tropas rusas vadearan para tomar Odesa. Pero un caso a?n m?s famoso es el de r?o Dniéper, que ahora hace de frontera por unos 300 kil?metros entre rusos y ucranianos en los alrededores de Jers?n, también ciudad retomada en los ?ltimos meses.
All?, seg?n un informe p?blico de febrero del ministerio de Defensa de Reino Unido, han continuado las escaramuzas y también las incursiones en la extendida red de islas y v?as fluviales del delta del Dniéper, desde que Rusia se retir? de la orilla occidental de este r?o en noviembre de 2022. En concreto, “las fuerzas rusas han casi seguramente usado peque?os botes para tratar de mantener su presencia en las islas clave; Ucrania ha desplegado varias veces con éxito artiller?a de largo alcance para neutralizar la actividad de los puestos rusos”. Actividades que, como la de los rusos, se cree que se mantendr?n para “controlar el acceso a este r?o de importancia estratégica" y para desalentar intentos de nuevas incursiones por parte de los enemigos.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/internacional/rios-armas-silenciosas-ucrania-84527588)
El pescador Oleg Borisovich se trepa entre los escombros, esquiva un cr?ter sin miedo a caer al agua, y sacude la cabeza desde uno de los puntos m?s altos de lo que queda de la represa. Cuando a?n exist?a la Uni?n Soviética era ge?logo y conoce cada rinc?n de estas aguas en las que viven lucios, carpas y besugos. “Antes de la guerra, pesqué aqu? uno de 50 kilogramos”, dice con orgullo, al saludar a otro de los pescadores que, enfundado en un chubasquero amarillo, sigue acudiendo al lugar. Hoy, en verdad, la pesca tampoco ha ido mal.
Frenar los rusos
Desde que la presa ya no funciona, el nivel del agua ha subido, hay peces donde no hab?a y el bot?n no casi nunca decepciona a los que, en tiempos de estrecheces, prefieren vivir de lo que entrega el r?o que de enlatados. Pero a Borisovich esto también le preocupa. “He visto estos r?os desde peque?o; es triste ver c?mo los hombres les hemos hecho cortes de manga. Primero la crisis clim?tica y ahora esta guerra lo est?n perturbando todo”, se lamenta. “Esta represa fue construida porque el r?o Oskil, que nace en Rusia, forma parte de un sistema que, junto con el Donets, se usaba para abastecer a algunas ciudades y empresas de Donetsk”, explica. “Pero en términos militares, este r?o ha sido, y es, una barrera para ambos bandos”, razona.
A unos 15 kil?metros de distancia, Maksim Strelmilov, oficial de la administraci?n regional de la cercana Izium, retomada por Ucrania en las mismas semanas, también explica c?mo el r?o que atraviesa la ciudad, el Donets, fren? el avance de las tropas rusas en los primeros meses de la invasi?n. “No pudieron atravesarlo r?pidamente y as? asediar a los batallones ucranianos en el Donb?s”, asegura este funcionario, de pie delante de un puente de pontones colocado por Ucrania durante su contraofensiva y ahora abandonado y hundido en las gélidas y heladas aguas del r?o.
“El Donets divide el norte y sur de la ciudad de Izium. Los rusos lograron capturar la parte norte el 7 de marzo, pero tardaron m?s de un mes en atravesar el Donets. La naturaleza nos ayud?”, contin?a Strelmilov. “Este es uno de los r?os m?s grandes de Ucrania. Tiene un canal muy ancho, en algunos lugares la profundidad llega hasta los 5 metros. El lugar donde ahora estamos sol?a ser una playa de la ciudad, donde descansaban ni?os, turistas y lugare?os. En este lugar la profundidad es de 1,5 metros”, explica.
El Bug Meridional y el Dniéper
Seg?n Strelmilov, las tropas rusas pudieron finalmente tomar toda la ciudad solo después de que algunos colaboradores (ciudadanos ucranianos que ayudan a las fuerzas rusas) le mostraran “otro punto” por el que cruzar. “De esta manera, el 1 de abril pudieron ocupar la ciudad”, dice. A?n as?, el tiempo perdido "impidi? el cerco de los soldados que estaban en las regiones de Donetsk y Lugansk, que eran las unidades m?s preparadas en ese momento. Y cuando tomaron Izium el ejército ucraniano ya hab?a construido una l?nea de defensa en direcci?n de Sloviansk”, a?ade.
El Donets y el Oskil no son los ?nicos r?os considerados estratégicos en la guerra de Ucrania, por la dificultad que existe en atravesarlos en seguridad, es decir, sin que el enemigo se entere. Otro ejemplo es el de Bug Meridional, que se temi? que las tropas rusas vadearan para tomar Odesa. Pero un caso a?n m?s famoso es el de r?o Dniéper, que ahora hace de frontera por unos 300 kil?metros entre rusos y ucranianos en los alrededores de Jers?n, también ciudad retomada en los ?ltimos meses.
All?, seg?n un informe p?blico de febrero del ministerio de Defensa de Reino Unido, han continuado las escaramuzas y también las incursiones en la extendida red de islas y v?as fluviales del delta del Dniéper, desde que Rusia se retir? de la orilla occidental de este r?o en noviembre de 2022. En concreto, “las fuerzas rusas han casi seguramente usado peque?os botes para tratar de mantener su presencia en las islas clave; Ucrania ha desplegado varias veces con éxito artiller?a de largo alcance para neutralizar la actividad de los puestos rusos”. Actividades que, como la de los rusos, se cree que se mantendr?n para “controlar el acceso a este r?o de importancia estratégica" y para desalentar intentos de nuevas incursiones por parte de los enemigos.
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