Reem
03-10-2023, 04:29 PM
La pandemia dispar? el uso de aplicaciones de citas, que ya suponen un negocio de 41 millones de d?lares solo en Espa?a. Seg?n un estudio de la Organizaci?n de Consumidores y Usuarios (OCU), uno de cada diez espa?oles usa aplicaciones de citas de forma habitual y el 21% la ha utilizado en alguna ocasi?n. Como casi todo, estos servicios tienen su cara y su cruz. La cara, sin duda, es que permiten conocer a gente de forma r?pida y sin invertir grandes esfuerzos. La cruz, que su uso continuado puede acabar descontrol?ndose y desembocando en una adicci?n.
De hecho, seg?n este mismo estudio, uno de cada tres usuarios de aplicaciones de citas se considera adicto. Asimismo, nueve de cada diez admiten haber utilizado estas plataformas en el trabajo al menos una vez, siendo la media diaria de unos 30-45 minutos.
Los expertos explican que este consumo adictivo no es casual, sino buscado a través del dise?o de diversos mecanismos conductistas y psicol?gicos que estas aplicaciones emplean para “fidelizar” a sus usuarios y conseguir que se suscriban a sus funcionalidades de pago. En concreto, los desarrolladores se valen de técnicas como la gamificaci?n, propias de los videojuegos, que “enchanchan” al usuario.
Deslizar los perfiles o el “swipe” infinito puede pasar r?pidamente de ser una forma m?s de pasar el rato a la necesidad de b?squeda incesante ante lo que se denomina FOMO (del inglés ‘fear of missing out’, “temor a dejar pasar” o “temor a perderse algo”) o una adicci?n. En este sentido, la psiquiatra Sandra Bravo, miembro de Top Doctors, alerta del alto nivel adictivo de estas aplicaciones, que provocan en el cerebro un efecto similar al de las tragaperras, las apuestas y algunas drogas.
“Es un mecanismo muy primario de nuestro cerebro, en el que un est?mulo nos produce placer y, por tanto, tenderemos a buscar ese est?mulo nuevamente para obtener ese bienestar que nos produjo inicialmente. En este caso concreto, en nuestro cerebro hay un chute de dopamina cuando deslizamos un perfil y hacemos ‘match’, cuando recibimos un mensaje de alguien que nos ha gustado o cuando la ‘app’ nos avisa de que le hemos gustado a alguien”, dice.
https://aglitk.com/clip/e0bd77e3-2aad-45ac-8bec-e1b90256545f_16-9-aspect-ratio_default_0.jpg Daniel Novoa. | FDV
"Si se ha convertido en adicci?n esto puede hacer que otras necesidades b?sicas queden sin cubrir”
Es lo que se denomina refuerzo intermitente, término desarrollado por el psic?logo y fil?sofo social B.F. Skinner: la incertidumbre con respecto a obtener una recompensa es m?s adictiva que la certidumbre de tener un premio por una actitud positiva.
“Una de las explicaciones m?s aceptadas a la hora de entender una adicci?n es que se ha construido un patr?n de refuerzo variable. Entiendo que en este caso ese refuerzo es quedar o tener la opci?n de quedar o interactuar con alguien interesante y atractivo”, explica Daniel Novoa.
El psic?logo vigués alerta de que la adicci?n a estas plataformas puede tener serias repercusiones en distintas ?reas de la vida de la persona. “Puede hacer que otras necesidades b?sicas queden sin cubrir, como las relaciones sociales. Otro indicador es dedicar unos recursos desproporcionados para mantener ese refuerzo, en este caso suscripciones premium o estar en m?ltiples plataformas”, dice.
Hay perfiles m?s vulnerables que otros a la hora de quedar enganchados a estas aplicaciones. Concretamente, los mileniales son un 125% m?s propensos que generaciones previas y los hombres, un 97% m?s vulnerables a engancharse que las mujeres, seg?n Match, la empresa matriz de la ‘app’ de citas estrella, Tinder.
“Veo m?s probable que esto les suceda a personas que no tienen una vida social muy rica, y proyecten sobre estas ‘apps’ su ?nica forma de poder tener interacciones con personas interesantes para ellos. Por tanto, las habilidades sociales y la capacidad de construir y mantener un mundo social enriquecedor son variables relevantes”, sostiene Novoa.
El momento vital que viva la persona o ver la aplicaci?n como el ?nico medio para conseguir un fin aumenta también el riesgo de caer en una adicci?n a la misma.
Como cualquier otra adicci?n, para desengancharse, lo primero que hay que hacer es reconocer el problema. “Esto puede parecer obvio, pero a veces este paso es el m?s importante”, matiza. Lo segundo, dejarse ayudar si la persona ve que no es capaz de hacerlo por s? mismo. “Otro factor que suele ayudar es poner tierra de por medio y buscar otro medio que pueda dar satisfacci?n, ya sea en la misma l?nea: m?s interacciones sociales, pero estas de tipo tradicional, o incluso buscar placer y satisfacci?n en otras cosas que no sean las ‘apps’ de citas”, sostiene.
Intenciones deshonestas
Las intenciones de quienes se descargan la aplicaci?n son muy diferentes. Seg?n la OCU, un tercio busca sexo ocasional, otro tercio busca una relaci?n seria o cierta estabilidad y el ?ltimo tercio solo quiere divertirse. De hecho, el 50% de los usuarios han tenido encuentros sexuales gracias a estas aplicaciones. Ahora bien, el anonimato, como puede pasar con otras redes sociales, puede derivar en faltas de respeto e incluso en acoso. De hecho, una de cada siete personas se ha sentido acosada a través de estas aplicaciones.
No todo el mundo en estas ‘apps’ tiene intenciones honestas, lo que puede llevar a que otros usuarios se sientan enga?ados, frustrados o con ansiedad. “Ser ingenuo en la vida tiene un precio y esto no es una excepci?n –comenta Novoa–. Las ‘apps’ de citas pueden ser un complemento perfectamente v?lido para encontrar experiencias nuevas, pero, como todo, hay que saber d?nde te metes, en el sentido de ser consciente de que van a intentar que pagues lo m?ximo por un servicio eficaz, y que algunas de las cosas que puedes ver son falsas o no buscan lo que t? pensabas. Hay muchos perfiles que no buscan una relaci?n o un encuentro, sino elevar su autoestima o tener m?s seguidores en redes sociales”.
La triada oscura
Por su parte, la doctora Sandra Bravo destaca que en estas 'apps' se desarrolla una tormenta perfecta, porque hay una conjunci?n de dos perfiles de usuarios: la Tr?ada Oscura y las personas dependientes o inseguras. La llamada "Tr?ada Oscura est? compuesta por gente con rasgos narcisistas, antisociales o maquiavélicos. A esas personas les gusta aumentar su ego y este es un buen lugar para conseguirlo, ya que usan las apps para encontrar sexo casual o para lograr ese subid?n de ego. Por otro lado, encontramos personas, especialmente mujeres, aunque también hombres en menor medida, huyendo de la soledad, con apego ansioso, y que usan las apps para conectar emocionalmente. Por ejemplo, alguien que desea tener hijos y considera que est? siendo tarde para hacerlo y no tiene pareja.
“Se cocina una bomba a punto de explotar: por un lado, individuos poco emp?ticos, muy centrados en sus propias necesidades, deseos de aumentar su ego, buscando relaciones casuales o muy superficiales, que pueden mentir para satisfacer sus necesidades y otras, con miedo a estar solteras, m?s dependientes, y, en muchas ocasiones, estas ?ltimas acaban con parejas con menos implicaci?n y en relaciones en la que la otra persona no est? dispuesta a dar lo mismo que ellas”, manifiesta la especialista de Top Doctors.
La adicci?n o la ansiedad relacionada al uso de estas plataformas es, cada vez m?s, un tema del que hablan en consulta pacientes de pr?cticamente todas las franjas de edad. “El problema en s? no es la 'app' de citas. La cuesti?n es que estas 'apps' nos est?n dando esa posibilidad de conocer a gente a un clic y aumentan nuestras posibilidades de encontrar a alguien, pero también el n?mero de rechazos, de v?nculos fallidos, de miedo a no ser suficiente… y esto de forma constante porque llevamos esa app todo el d?a con nosotros, por lo que se hace a?n m?s evidente", se?ala.
Las personas en estas 'apps' muchas veces act?an sin tener en cuenta el impacto en la persona al otro lado de la pantalla y, algunos usuarios, podr?an jugar el papel de detonantes para los problemas de otros (falta de empat?a o de compromiso, cr?ticas…).
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/sociedad/enganchados-tinder-vida-plataformas-conocer-84446493)
De hecho, seg?n este mismo estudio, uno de cada tres usuarios de aplicaciones de citas se considera adicto. Asimismo, nueve de cada diez admiten haber utilizado estas plataformas en el trabajo al menos una vez, siendo la media diaria de unos 30-45 minutos.
Los expertos explican que este consumo adictivo no es casual, sino buscado a través del dise?o de diversos mecanismos conductistas y psicol?gicos que estas aplicaciones emplean para “fidelizar” a sus usuarios y conseguir que se suscriban a sus funcionalidades de pago. En concreto, los desarrolladores se valen de técnicas como la gamificaci?n, propias de los videojuegos, que “enchanchan” al usuario.
Deslizar los perfiles o el “swipe” infinito puede pasar r?pidamente de ser una forma m?s de pasar el rato a la necesidad de b?squeda incesante ante lo que se denomina FOMO (del inglés ‘fear of missing out’, “temor a dejar pasar” o “temor a perderse algo”) o una adicci?n. En este sentido, la psiquiatra Sandra Bravo, miembro de Top Doctors, alerta del alto nivel adictivo de estas aplicaciones, que provocan en el cerebro un efecto similar al de las tragaperras, las apuestas y algunas drogas.
“Es un mecanismo muy primario de nuestro cerebro, en el que un est?mulo nos produce placer y, por tanto, tenderemos a buscar ese est?mulo nuevamente para obtener ese bienestar que nos produjo inicialmente. En este caso concreto, en nuestro cerebro hay un chute de dopamina cuando deslizamos un perfil y hacemos ‘match’, cuando recibimos un mensaje de alguien que nos ha gustado o cuando la ‘app’ nos avisa de que le hemos gustado a alguien”, dice.
https://aglitk.com/clip/e0bd77e3-2aad-45ac-8bec-e1b90256545f_16-9-aspect-ratio_default_0.jpg Daniel Novoa. | FDV
"Si se ha convertido en adicci?n esto puede hacer que otras necesidades b?sicas queden sin cubrir”
Es lo que se denomina refuerzo intermitente, término desarrollado por el psic?logo y fil?sofo social B.F. Skinner: la incertidumbre con respecto a obtener una recompensa es m?s adictiva que la certidumbre de tener un premio por una actitud positiva.
“Una de las explicaciones m?s aceptadas a la hora de entender una adicci?n es que se ha construido un patr?n de refuerzo variable. Entiendo que en este caso ese refuerzo es quedar o tener la opci?n de quedar o interactuar con alguien interesante y atractivo”, explica Daniel Novoa.
El psic?logo vigués alerta de que la adicci?n a estas plataformas puede tener serias repercusiones en distintas ?reas de la vida de la persona. “Puede hacer que otras necesidades b?sicas queden sin cubrir, como las relaciones sociales. Otro indicador es dedicar unos recursos desproporcionados para mantener ese refuerzo, en este caso suscripciones premium o estar en m?ltiples plataformas”, dice.
Hay perfiles m?s vulnerables que otros a la hora de quedar enganchados a estas aplicaciones. Concretamente, los mileniales son un 125% m?s propensos que generaciones previas y los hombres, un 97% m?s vulnerables a engancharse que las mujeres, seg?n Match, la empresa matriz de la ‘app’ de citas estrella, Tinder.
“Veo m?s probable que esto les suceda a personas que no tienen una vida social muy rica, y proyecten sobre estas ‘apps’ su ?nica forma de poder tener interacciones con personas interesantes para ellos. Por tanto, las habilidades sociales y la capacidad de construir y mantener un mundo social enriquecedor son variables relevantes”, sostiene Novoa.
El momento vital que viva la persona o ver la aplicaci?n como el ?nico medio para conseguir un fin aumenta también el riesgo de caer en una adicci?n a la misma.
Como cualquier otra adicci?n, para desengancharse, lo primero que hay que hacer es reconocer el problema. “Esto puede parecer obvio, pero a veces este paso es el m?s importante”, matiza. Lo segundo, dejarse ayudar si la persona ve que no es capaz de hacerlo por s? mismo. “Otro factor que suele ayudar es poner tierra de por medio y buscar otro medio que pueda dar satisfacci?n, ya sea en la misma l?nea: m?s interacciones sociales, pero estas de tipo tradicional, o incluso buscar placer y satisfacci?n en otras cosas que no sean las ‘apps’ de citas”, sostiene.
Intenciones deshonestas
Las intenciones de quienes se descargan la aplicaci?n son muy diferentes. Seg?n la OCU, un tercio busca sexo ocasional, otro tercio busca una relaci?n seria o cierta estabilidad y el ?ltimo tercio solo quiere divertirse. De hecho, el 50% de los usuarios han tenido encuentros sexuales gracias a estas aplicaciones. Ahora bien, el anonimato, como puede pasar con otras redes sociales, puede derivar en faltas de respeto e incluso en acoso. De hecho, una de cada siete personas se ha sentido acosada a través de estas aplicaciones.
No todo el mundo en estas ‘apps’ tiene intenciones honestas, lo que puede llevar a que otros usuarios se sientan enga?ados, frustrados o con ansiedad. “Ser ingenuo en la vida tiene un precio y esto no es una excepci?n –comenta Novoa–. Las ‘apps’ de citas pueden ser un complemento perfectamente v?lido para encontrar experiencias nuevas, pero, como todo, hay que saber d?nde te metes, en el sentido de ser consciente de que van a intentar que pagues lo m?ximo por un servicio eficaz, y que algunas de las cosas que puedes ver son falsas o no buscan lo que t? pensabas. Hay muchos perfiles que no buscan una relaci?n o un encuentro, sino elevar su autoestima o tener m?s seguidores en redes sociales”.
La triada oscura
Por su parte, la doctora Sandra Bravo destaca que en estas 'apps' se desarrolla una tormenta perfecta, porque hay una conjunci?n de dos perfiles de usuarios: la Tr?ada Oscura y las personas dependientes o inseguras. La llamada "Tr?ada Oscura est? compuesta por gente con rasgos narcisistas, antisociales o maquiavélicos. A esas personas les gusta aumentar su ego y este es un buen lugar para conseguirlo, ya que usan las apps para encontrar sexo casual o para lograr ese subid?n de ego. Por otro lado, encontramos personas, especialmente mujeres, aunque también hombres en menor medida, huyendo de la soledad, con apego ansioso, y que usan las apps para conectar emocionalmente. Por ejemplo, alguien que desea tener hijos y considera que est? siendo tarde para hacerlo y no tiene pareja.
“Se cocina una bomba a punto de explotar: por un lado, individuos poco emp?ticos, muy centrados en sus propias necesidades, deseos de aumentar su ego, buscando relaciones casuales o muy superficiales, que pueden mentir para satisfacer sus necesidades y otras, con miedo a estar solteras, m?s dependientes, y, en muchas ocasiones, estas ?ltimas acaban con parejas con menos implicaci?n y en relaciones en la que la otra persona no est? dispuesta a dar lo mismo que ellas”, manifiesta la especialista de Top Doctors.
La adicci?n o la ansiedad relacionada al uso de estas plataformas es, cada vez m?s, un tema del que hablan en consulta pacientes de pr?cticamente todas las franjas de edad. “El problema en s? no es la 'app' de citas. La cuesti?n es que estas 'apps' nos est?n dando esa posibilidad de conocer a gente a un clic y aumentan nuestras posibilidades de encontrar a alguien, pero también el n?mero de rechazos, de v?nculos fallidos, de miedo a no ser suficiente… y esto de forma constante porque llevamos esa app todo el d?a con nosotros, por lo que se hace a?n m?s evidente", se?ala.
Las personas en estas 'apps' muchas veces act?an sin tener en cuenta el impacto en la persona al otro lado de la pantalla y, algunos usuarios, podr?an jugar el papel de detonantes para los problemas de otros (falta de empat?a o de compromiso, cr?ticas…).
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/sociedad/enganchados-tinder-vida-plataformas-conocer-84446493)