Reem
02-28-2023, 07:46 AM
El pasado 9 de febrero, el Congreso aprob? la ley de bienestar animal y la reforma del C?digo Penal para endurecer el maltrato a los animales, que es otra ley. Varios diputados y diputadas de los grupos que forman el Gobierno, cuando vieron los paneles electr?nicos, resoplaron. La primera sali? con 174 votos a favor, mientras que la segunda recibi? 178 apoyos, dos por encima de la mayor?a absoluta que necesita en tanto que ley org?nica. Cost? mucho llegar a ambas cifras.
El Congreso envi? los textos de los proyectos legislativos al Senado, en donde la configuraci?n de mayor?as es diferente. Para empezar, Unidas Podemos no tiene representaci?n. El eje en el que se sostiene el Gobierno aqu? lo forma el grupo de ERC y EH Bildu, que van juntos en la C?mara Alta. La alianza entre el grupo socialista y el de los independentistas catalanes y vascos crea una base de 129 senadores, lo que es un alivio, porque la mayor?a absoluta est? en 133.
Para tramitar la ley de bienestar animal y la reforma del C?digo Penal conviene reparar en esos 129 senadores. Primero porque en el Congreso ERC y EH Bildu votaron a favor de las dos normas, lo que da a entender que mantendr?n posici?n, a no ser que los independentistas quieran cobrarse una hipotética jugarreta pol?tica en otro tr?mite. Ahora bien, que esto asegure la traves?a tranquila de dos normas que han sido y son un quebradero de cabeza para el Gobierno es a?n una quimera. Se avecina una semana interesante.
La urgencia
La Comisi?n de Derechos Sociales se va a reunir el jueves para despachar de una tacada la ley de bienestar y la ley org?nica que reforma el C?digo Penal. A las 10.30 horas se reunir? para analizar el informe del primer proyecto; a las 10.45 har? lo propio con el informe del segundo. A las 12.00 debate y votaci?n de los dos textos con el fin de convertirlos en dict?menes y elevarlos al pleno de la semana que viene.
Los pasos de las leyes del Gobierno por las comisiones correspondientes del Senado empiezan a ser hilarantes. En un d?a, o por ser m?s preciso, en una ma?ana o en una tarde, pum, informe y dictamen. Puede hacerse porque el Gobierno pide tr?mite de urgencia, y eso concentra los plazos en apenas 20 d?as. El malestar lo airea la oposici?n, a la que le gustar?a m?s tiempo para negociar cambios.
Al desaire constante en el que vive el PP se unen episodios espor?dicos de enfado de formaciones pr?ximas al Ejecutivo, ideol?gicamente hablando. Por ejemplo, la Izquierda Confederal agrupa a varias siglas de raigambre territorial (la valenciana Comprom?s, la navarra Geroa Bai, la Agrupaci?n Socialista de La Gomera, la mallorquina Més y M?s Madrid) y es francamente complicado que cualquiera de estas organizaciones deje su sello en alguna norma.
Influye en la rapidez del viaje de las leyes por las comisiones que muchas negociaciones, en vez de cerrarse completamente en este ?mbito, se postergan total o parcialmente al pleno. Se alarga una semana el tiempo de la transacci?n, lo que da algo de ox?geno pol?tico, sin duda, aunque a cambio se estiran las sesiones plenarias hasta la eternidad gracias a votaciones que no acaban nunca.
Tiene pinta de que va a suceder algo as? con la ley de bienestar animal y con la reforma del C?digo Penal porque, preguntadas dos fuentes de la Comisi?n de Derechos Sociales por la existencia de conversaciones al respecto, la respuesta es el silencio y la nada. Un senador se?ala a este medio que no es ni mucho menos habitual que la direcci?n socialista apure tanto. “No sé si es que lo tienen tan claro con estas normas y dan por hecho que las aprueban sin cambios”, agrega.
El punto a favor de la ley org?nica
Un poco de matem?ticas, que en el Senado tienen su ‘gracia’. Efectivamente al Gobierno debe tranquilizar que a los 113 senadores socialistas se unan, en estas dos leyes, los de ERC y EH Bildu, 16 esca?os en total. Pero de aqu? a confiarse…
El PP, que est? en contra, tiene 104 esca?os. El PNV, otro en contra, 10. Si no han cambiado de posici?n respecto a lo que votaron en el Congreso, hay que a?adir en esta lista de formaciones del “no” a Coalici?n Canaria (1), M?s Madrid (1), PRC (1), Ciudadanos (1), Vox (3) e incluso a UPN (1), aunque en la C?mara Baja sus dos diputados se borraron del partido. En total, 122. Ni siquiera empatan con la alianza de PSOE-ERC-EH Bildu.
En el grupo de las abstenciones, siempre y cuando no hayan virado, residir?an Junts (5), Teruel Existe (2) y Comprom?s (1), si bien el partido valenciano vot? a favor de la reforma del C?digo Penal en el Congreso. Una tragedia para el Gobierno ser?a que pasaran todos al voto en contra. Quedar?an en el limbo los senadores de Agrupaci?n Socialista de La Gomera (1), Geroa Bai (1), Més (1), PAR (1) y los dos independientes que ingresaron en el Mixto. Si estos, por lo que fuera, se desplazaran también al ‘no’, m?s que tragedia para el Ejecutivo, ser?a una cat?strofe. No hay un solo indicio de ello por el momento.
Se da una particularidad reglamentaria que sosiega los ?nimos. La Constituci?n consagra la aprobaci?n por mayor?a absoluta de las leyes org?nicas, y la que reforma el C?digo Penal lo es, pero este requisito de consenso ata?e solamente al Congreso. El Senado, lo que hace, es plantear vetos y enmiendas.
Los primeros pretenden devolver el texto a la C?mara Baja tal cual llegaron, y para que prosperen s? que es preceptiva la mayor?a absoluta del Senado. Las segundas persiguen modificaciones parciales, para lo que basta la mayor?a simple. Dada la aritmética del Senado, un veto es pr?cticamente inviable, pero las enmiendas no. Las enmiendas, de hecho, son perfectamente viables. No son pocas las semanas en las que los senadores logran cambios en los contenidos legislativos. Los proyectos regresan, por tanto, al Congreso y el pleno decide si acepta las modificaciones o las rechaza.
6 vetos; 525 enmiendas
Hasta el 23 de febrero tuvieron de plazo los grupos para registrar vetos y enmiendas. Hay seis peticiones de devoluci?n de los proyectos: cuatro afectan a la ley de bienestar animal y los firman el PP, el PNV y el Mixto (2); y dos buscan neutralizar la reforma del C?digo Penal, del grupo popular y del Mixto también. No es extra?o que los nacionalistas vascos hayan pedido vetar. Lo hicieron en el Congreso, en donde no se movieron del voto en contra en ning?n momento.
A pesar de la contracci?n de los plazos, los grupos se han explayado en el registro. Han presentado un sinf?n. 525 en total. A la de la reforma del C?digo Penal se han presentado 76, distribuidas as?: 2 del PP, 18 de ERC y EH Bildu, 14 del grupo nacionalista (Junts y CC), 41 de la Izquierda Confederal y 1 del grupo democr?tico.
A la ley de bienestar animal han llegado 449: 8 del PSOE, 112 del PP, 38 de ERC y EH Bildu, 28 del PNV, 35 del grupo nacionalista, 110 de la izquierda confederal, 17 del grupo democr?tico y 101 del Mixto.
De lo que se trata en el Senado, lo que interesa al PSOE, es ir rechazando todas las enmiendas, excepto, quiz?, alguna propia (los socialistas han registrado ocho). Para ello, necesita que votaci?n a votaci?n, y va a haber un mont?n, funcione la mayor?a que ha articulado en la C?mara Alta, sujetada principalmente en la pinza con ERC-EH Bildu. Necesita esa mayor?a bien engrasada, en definitiva, y que no se produzcan uniones indeseadas, como aquella que toc? una palabra de la ley del s?lo s? es s? debido a una muy poco habitual entente entre PP, Junts, etcétera. No es un reto menor.
Si sucediera, quedar? el visto bueno del Congreso, el visto bueno final, pero tal y como est?n avanzando la ley de bienestar animal y la reforma del C?digo Penal, quiz? convenga al PSOE y a Unidas Podemos que las leyes salgan cuanto antes del Parlamento. Las fricciones entre los socios de la coalici?n no han faltado. Si no es la controversia por los perros de caza, que enfrent? a PSOE y a Unidas Podemos en el Congreso, es por la susceptibilidad del resto de los grupos asiduamente aliados del Ejecutivo. En el Congreso hubo hasta agon?a. Mejor no descartar nada en el Senado.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/nacional/nuevo-reto-gobierno-leyes-maltrato-83859953)
El Congreso envi? los textos de los proyectos legislativos al Senado, en donde la configuraci?n de mayor?as es diferente. Para empezar, Unidas Podemos no tiene representaci?n. El eje en el que se sostiene el Gobierno aqu? lo forma el grupo de ERC y EH Bildu, que van juntos en la C?mara Alta. La alianza entre el grupo socialista y el de los independentistas catalanes y vascos crea una base de 129 senadores, lo que es un alivio, porque la mayor?a absoluta est? en 133.
Para tramitar la ley de bienestar animal y la reforma del C?digo Penal conviene reparar en esos 129 senadores. Primero porque en el Congreso ERC y EH Bildu votaron a favor de las dos normas, lo que da a entender que mantendr?n posici?n, a no ser que los independentistas quieran cobrarse una hipotética jugarreta pol?tica en otro tr?mite. Ahora bien, que esto asegure la traves?a tranquila de dos normas que han sido y son un quebradero de cabeza para el Gobierno es a?n una quimera. Se avecina una semana interesante.
La urgencia
La Comisi?n de Derechos Sociales se va a reunir el jueves para despachar de una tacada la ley de bienestar y la ley org?nica que reforma el C?digo Penal. A las 10.30 horas se reunir? para analizar el informe del primer proyecto; a las 10.45 har? lo propio con el informe del segundo. A las 12.00 debate y votaci?n de los dos textos con el fin de convertirlos en dict?menes y elevarlos al pleno de la semana que viene.
Los pasos de las leyes del Gobierno por las comisiones correspondientes del Senado empiezan a ser hilarantes. En un d?a, o por ser m?s preciso, en una ma?ana o en una tarde, pum, informe y dictamen. Puede hacerse porque el Gobierno pide tr?mite de urgencia, y eso concentra los plazos en apenas 20 d?as. El malestar lo airea la oposici?n, a la que le gustar?a m?s tiempo para negociar cambios.
Al desaire constante en el que vive el PP se unen episodios espor?dicos de enfado de formaciones pr?ximas al Ejecutivo, ideol?gicamente hablando. Por ejemplo, la Izquierda Confederal agrupa a varias siglas de raigambre territorial (la valenciana Comprom?s, la navarra Geroa Bai, la Agrupaci?n Socialista de La Gomera, la mallorquina Més y M?s Madrid) y es francamente complicado que cualquiera de estas organizaciones deje su sello en alguna norma.
Influye en la rapidez del viaje de las leyes por las comisiones que muchas negociaciones, en vez de cerrarse completamente en este ?mbito, se postergan total o parcialmente al pleno. Se alarga una semana el tiempo de la transacci?n, lo que da algo de ox?geno pol?tico, sin duda, aunque a cambio se estiran las sesiones plenarias hasta la eternidad gracias a votaciones que no acaban nunca.
Tiene pinta de que va a suceder algo as? con la ley de bienestar animal y con la reforma del C?digo Penal porque, preguntadas dos fuentes de la Comisi?n de Derechos Sociales por la existencia de conversaciones al respecto, la respuesta es el silencio y la nada. Un senador se?ala a este medio que no es ni mucho menos habitual que la direcci?n socialista apure tanto. “No sé si es que lo tienen tan claro con estas normas y dan por hecho que las aprueban sin cambios”, agrega.
El punto a favor de la ley org?nica
Un poco de matem?ticas, que en el Senado tienen su ‘gracia’. Efectivamente al Gobierno debe tranquilizar que a los 113 senadores socialistas se unan, en estas dos leyes, los de ERC y EH Bildu, 16 esca?os en total. Pero de aqu? a confiarse…
El PP, que est? en contra, tiene 104 esca?os. El PNV, otro en contra, 10. Si no han cambiado de posici?n respecto a lo que votaron en el Congreso, hay que a?adir en esta lista de formaciones del “no” a Coalici?n Canaria (1), M?s Madrid (1), PRC (1), Ciudadanos (1), Vox (3) e incluso a UPN (1), aunque en la C?mara Baja sus dos diputados se borraron del partido. En total, 122. Ni siquiera empatan con la alianza de PSOE-ERC-EH Bildu.
En el grupo de las abstenciones, siempre y cuando no hayan virado, residir?an Junts (5), Teruel Existe (2) y Comprom?s (1), si bien el partido valenciano vot? a favor de la reforma del C?digo Penal en el Congreso. Una tragedia para el Gobierno ser?a que pasaran todos al voto en contra. Quedar?an en el limbo los senadores de Agrupaci?n Socialista de La Gomera (1), Geroa Bai (1), Més (1), PAR (1) y los dos independientes que ingresaron en el Mixto. Si estos, por lo que fuera, se desplazaran también al ‘no’, m?s que tragedia para el Ejecutivo, ser?a una cat?strofe. No hay un solo indicio de ello por el momento.
Se da una particularidad reglamentaria que sosiega los ?nimos. La Constituci?n consagra la aprobaci?n por mayor?a absoluta de las leyes org?nicas, y la que reforma el C?digo Penal lo es, pero este requisito de consenso ata?e solamente al Congreso. El Senado, lo que hace, es plantear vetos y enmiendas.
Los primeros pretenden devolver el texto a la C?mara Baja tal cual llegaron, y para que prosperen s? que es preceptiva la mayor?a absoluta del Senado. Las segundas persiguen modificaciones parciales, para lo que basta la mayor?a simple. Dada la aritmética del Senado, un veto es pr?cticamente inviable, pero las enmiendas no. Las enmiendas, de hecho, son perfectamente viables. No son pocas las semanas en las que los senadores logran cambios en los contenidos legislativos. Los proyectos regresan, por tanto, al Congreso y el pleno decide si acepta las modificaciones o las rechaza.
6 vetos; 525 enmiendas
Hasta el 23 de febrero tuvieron de plazo los grupos para registrar vetos y enmiendas. Hay seis peticiones de devoluci?n de los proyectos: cuatro afectan a la ley de bienestar animal y los firman el PP, el PNV y el Mixto (2); y dos buscan neutralizar la reforma del C?digo Penal, del grupo popular y del Mixto también. No es extra?o que los nacionalistas vascos hayan pedido vetar. Lo hicieron en el Congreso, en donde no se movieron del voto en contra en ning?n momento.
A pesar de la contracci?n de los plazos, los grupos se han explayado en el registro. Han presentado un sinf?n. 525 en total. A la de la reforma del C?digo Penal se han presentado 76, distribuidas as?: 2 del PP, 18 de ERC y EH Bildu, 14 del grupo nacionalista (Junts y CC), 41 de la Izquierda Confederal y 1 del grupo democr?tico.
A la ley de bienestar animal han llegado 449: 8 del PSOE, 112 del PP, 38 de ERC y EH Bildu, 28 del PNV, 35 del grupo nacionalista, 110 de la izquierda confederal, 17 del grupo democr?tico y 101 del Mixto.
De lo que se trata en el Senado, lo que interesa al PSOE, es ir rechazando todas las enmiendas, excepto, quiz?, alguna propia (los socialistas han registrado ocho). Para ello, necesita que votaci?n a votaci?n, y va a haber un mont?n, funcione la mayor?a que ha articulado en la C?mara Alta, sujetada principalmente en la pinza con ERC-EH Bildu. Necesita esa mayor?a bien engrasada, en definitiva, y que no se produzcan uniones indeseadas, como aquella que toc? una palabra de la ley del s?lo s? es s? debido a una muy poco habitual entente entre PP, Junts, etcétera. No es un reto menor.
Si sucediera, quedar? el visto bueno del Congreso, el visto bueno final, pero tal y como est?n avanzando la ley de bienestar animal y la reforma del C?digo Penal, quiz? convenga al PSOE y a Unidas Podemos que las leyes salgan cuanto antes del Parlamento. Las fricciones entre los socios de la coalici?n no han faltado. Si no es la controversia por los perros de caza, que enfrent? a PSOE y a Unidas Podemos en el Congreso, es por la susceptibilidad del resto de los grupos asiduamente aliados del Ejecutivo. En el Congreso hubo hasta agon?a. Mejor no descartar nada en el Senado.
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