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ãÔÇåÏÉ ÇáäÓÎÉ ßÇãáÉ : Antonio Ma?llo: "Ya la etapa de los hiperliderazgos ha desaparecido"


Reem
05-04-2024, 06:40 AM
La entrevista con Antonio Ma?llo (Lucena, C?rdoba, 1966) se realiza apenas unas horas antes de que Sira Rego (https://www.sport.es/es/temas/sira-rego-1919996), ministra de Juventud e Infancia del Gobierno de Espa?a, presente en Sevilla (https://www.sport.es/es/temas/sevilla-1837867)su candidatura como coordinadora general de Izquierda Unida (https://www.sport.es/es/temas/izquierda-unida-1840667). Como es habitual en esta izquierda desde que el tiempo es tiempo, comparten con el com?n sus diatribas internas. Siempre c?clicas, unas veces m?s insalvables que otras.

En una comparecencia ante la prensa, el n?mero dos de esta lista, Antonio Rodrigo Torrijos, ex teniente de alcalde del Ayuntamiento de Sevila, ha sido el encargado de calentar las v?speras de la votaci?n en asamblea de la militancia de Izquierda, dejando poco margen a las dudas: [con Ma?llo] Se cre?, ha dicho, una pol?tica de "subalternidad" con Podemos y Adelante Andaluc?a, "desapareciendo del mapa pol?tico".

Horas previas a las declaraciones, Ma?llo, que fue en su tiempo uno de los mejores oradores del Parlamento de Andaluc?a (https://www.sport.es/es/temas/andalucia-1835250), se afana en explicar su proyecto, que pasa por la confluencia con otras formaciones de izquierda pero con el protagonismo que se ha usurpado, seg?n se lee de sus palabras, a IU en los ?ltimos a?os, desde la aparici?n de esa nueva pol?tica al calor del 15M.

No quiere moquetas, eso dice. Quiere carretera y manta. Est? de vuelta y le va la marcha. Lector voraz tiene entre manos Espa?a. El pacto y la furia, de Enric Juliana, En los or?genes del conflicto andaluz, de Carlos Arenas, y Abril es un pa?s, el retrato del 50 aniversario de la revoluci?n de los claveles de Portugal que firma Tereixa Constenla.

Cinco a?os de retiro. ?Qué ha aprendido?

A respirar. Han sido cinco a?os de mucha reflexi?n, de aterrizaje personal y de mucho aprendizaje de mi alumnado en los marcos en los que ellos se mueven, lo cual permite relativizar los debates tan a lo susto o muerte que hay en pol?tica.

?Qué saben ellos de pol?tica? ?De qué hablan?

M?s que de pol?tica, ellos saben mucho de feminismo, de igualdad, de diversidad sexual. Demuestran ser muy tolerantes. Y aunque no sean conscientes de que eso es producto de unas medidas pol?ticas, de modelos de sociedad, las tienen totalmente interiorizadas. Me llama la atenci?n positivamente el empoderamiento de las chicas en los institutos.

?C?mo fue el momento en el que se plantea: ahora s?, me toca volver?

Ha sido un momento sobrevenido porque no era lo que estaba planificado. Me llamaron y me convencieron para que intentara construir un acuerdo amplio pol?tico en Izquierda Unida para la Asamblea, desde la convicci?n de que se pod?a conseguir. El dar el salto a presentarme con una lista para dirigir la organizaci?n es producto la ausencia del acuerdo. No ten?a intenci?n de presentarme ni era mi objetivo.

O sea, que ese salto a la primera l?nea viene de una falta de acuerdo.

En pol?tica, los caminos son, como los del Se?or, inexcrutables. Mi salto a presentarme como candidato ha generado una alegr?a y un entusiasmo que agradezco mucho. Hemos sacado del letargo un poco a Izquierda Unida. Estoy convencido de que va a ser un debate muy positivo y muy propositivo, donde cada candidato presente cu?l es su proyecto para nuestra organizaci?n y que gane el que diga la militancia.

Ha recogido ya el 40% de los avales: ?por qué cree que tantos han confiado en Antonio Maillo?

Creo que la gente no se imaginaba que yo iba a presentarme y lo que he percibido es que, a pesar de las dificultades en las que nos encontramos, se valora que se est? dispuesto a luchar por este proyecto, que alguien se moje. Sinceramente no es un momento f?cil para dirigir una organizaci?n. Y luego es una candidatura que tiene el apoyo de todas las organizaciones pol?ticas, de todos los partidos que est?n dentro de IU: Partido Comunista, Candidatura Unitaria de Trabajadores e Izquierda Republicana y pr?cticamente de todas las federaciones, sobre todo Andaluc?a y Asturias, con mucho ?mbito de gesti?n y de gobierno en sus territorios.

Si finalmente es elegido coordinador general de Izquierda Unida, ?c?mo va a ser esa interlocuci?n con la sociedad estando fuera de las instituciones?

La lecci?n que sacamos de los ?ltimos a?os ha sido que quiz?s ha habido una especie de exaltaci?n de las individualidades en las direcciones de los partidos: una suerte de superhombre o supermujer que dirige todo, que es gobierno, que es organizaci?n, que es interlocuci?n con la sociedad, que es instituci?n. Lo que hace falta es una direcci?n de carretera y manta donde las asambleas, que se han sentido muy abandonadas en estos ?ltimos a?os, tengan un debate a calz?n quitado, como el que hemos tenido siempre en IU. En los tiempos de la direcci?n andaluza, que también fueron muy complicados, esa din?mica de contacto directo fue clave para resistir los envites de otras formaciones pol?ticas que vinieron, en plan tsunami, y que pod?an habernos devorado.

Para resistir aquellos tiempos de confluencia que muchos ve?an con recelo, dice.

Pero sobre todo para resistir porque hab?a ah? un tsunami que nos pod?a haber llevado por delante. Esa complicidad de la militancia, esa confianza mutua, incluso no coincidiendo en los planteamientos pol?ticos que cada uno nos hac?amos, fue determinante para mantener la red tan formidable que tenemos de capilaridad y de contacto con el territorio. Izquierda Unida no es una organizaci?n que esté en un territorio solamente, estamos en todas las comunidades aut?nomas de Espa?a, tenemos una visi?n federal, por tanto una estrategia federal, tenemos una gran influencia en los ayuntamientos. Y creo que en estos momentos en los que ya la etapa de los hiperliderazgos ha desaparecido, el arraigo territorial va a formar parte fundamental de la construcci?n y del fortalecimiento de nuestra organizaci?n. Sinceramente, sin Izquierda Unida es muy dif?cil que se pueda construir en Espa?a ning?n espacio que tenga realmente conexi?n con los territorios y capilaridad en la sociedad civil.

?El problema de Sumar ha sido que ha contado poco con Izquierda Unida?

Yo creo que no es un problema de Sumar y antes Podemos, yo creo que en todo lo que es el espacio de confluencia o hay un di?logo sincero y se crea un espacio en el que haya un método democr?tico en la toma de decisiones y, sobre todo, haya un respeto a la pluralidad que permita que todos los que formamos parte de un frente amplio de una confluencia nos sintamos c?modos, o no va a tener éxito. Las tentaciones de establecer una especie de modelo mayoritario que desprecia a la minor?a no van a tener éxito.

?Entiendo que opina que Izquierda Unida ha sido muy generosa este tiempo?

Izquierda Unida ha sido muy responsable, a veces demasiado. No podemos someter a m?s estrés pol?tico a la gente a la que queremos representar. Podemos pensar que en las elecciones europeas pod?amos estar en una mejor posici?n pero, por encima de todo, ponemos la conciencia de que ahora mismo la propuesta de Sumar es la que objetivamente permite dar la voz del hilo rojo que nosotros representamos dentro de un Parlamento Europeo en el que puede avanzar la derecha y la extrema derecha. No perder de vista esa situaci?n es fundamental frente al ensimismamiento o las tentaciones ilusionistas de decir mejor solos.

Posiblemente yendo unidos no consigamos todos los objetivos pero lo que est? claro es que yendo desunidos el fracaso es absoluto







Hay compa?eros que defienden ese modelo y a m? me parece que eso nos lleva a desaparecer y a desconectar de la sociedad civil que aspira a la unidad. Y una certeza, posiblemente yendo unidos no consigamos todos los objetivos pero lo que est? claro es que yendo desunidos el fracaso es absoluto y eso lo podemos constatar en las experiencias electorales que hemos tenido. Por eso defiendo este Frente Amplio, por encima de todo, se llame como se llame, que tenga una voluntad de ensanchar espacios y donde IU tenga protagonismo. Las decisiones no pueden ser unipersonales ni verticales.

En el caso de que se repitieran elecciones generales, ?Izquierda Unida se plantear?a ir por separado de Sumar?

Yo no voy a defender eso nunca y hay otros compa?eros que lo defienden. La candidatura que yo represento apuesta por la confluencia con otra gente desde un protagonismo y fortalecimiento de IU.

?Por qué no ha sido posible el acuerdo con Sira Rego?

Lo hemos intentado desde hace meses pero siempre choc?bamos en lo mismo: creemos que se ha superado el modelo de superliderazgo. Yo no tengo miedo a estar con gente que no tiene que opinar siempre lo que yo diga.

Si, dado el caso, Sira Rego pierde, ?cree que debe poner a disposici?n de la militancia del partido su cargo como ministra de Juventud e Infancia? ?O no tiene nada que ver?

Mi caso mi candidatura es con diferencia la que m?s avales ha tenido pero a la hora de la verdad, hay que votar. Y ahora, por supuesto, que aqu? no se cambia nada: por decirlo de alguna forma, yo no voy a ser ministro, es decir, cuando yo digo que quiero una militancia de carretera y manta es porque yo me quiero dedicar a estar con la asamblea, a construir tejidos sociales, a interlocutar con gente y la compa?era Sira tiene que seguir en el Gobierno, que para eso la nombra Pedro S?nchez en la cuota de Sumar.

?Qué balance hace de este primer a?o de Sumar?

Que se han podido hacer las cosas mejor, sin duda. Pero cuidado que las experiencias de confluencia sean manifiestamente mejorables no pueden llevar a concluir que lo mejor es aislarnos.

A toda esa militancia que se quiere dirigir, ?qué os une?

Una conciencia de que representamos una tradici?n hist?rica en la izquierda, que est? perfectamente vigente, la constataci?n de que, durante esta década, los nuevos métodos de organizaci?n pol?tica no han mejorado ni mucho menos los que nosotros ten?amos, que aunque puedan ser un poco m?s lentos para las din?micas de ahora son profundamente democr?ticos y de debate y que es fundamental que todo proyecto pol?tico esté vinculado al territorio y que todo hiperliderazgo que no se base en un componente o soporte territorial est? condenado al fracaso.

?Y Podemos?

Yo respeto su debate. Nosotros en Izquierda Unida estamos experimentando en algunos territorios alianzas con Podemos como en Extremadura o Andaluc?a que est?n construyéndose de manera positiva. Pero claro, eso lo tiene que decidir Podemos, no nosotros. Yo creo que un debate leal y honesto que siempre es positivo frente a las tentaciones que siempre va a haber en Espa?a de reconstrucci?n bipartidista.

Se cumplen dos a?os de legislatura andaluza y de ese proyecto que fue Por Andaluc?a: ?qué lectura hace?

Tuvo unos momentos dif?ciles, sin embargo ahora est?n construyendo…

?Construyendo? ?Ve encauzada la relaci?n?

S?, s?, de un medio a otro. A eso me refer?a antes cuando dec?a que se est?n encauzando relaciones, est?n siendo conscientes del momento que se vive y creo que, desde las periferias, que es uno de los marcos de mi propuesta, podemos contribuir a la cultura pol?tica y esto trasciende. Podemos contribuir a una cultura pol?tica del matiz, del respeto, de la tolerancia y frente a la hiperventilaci?n que viene de Madrid. Creo que ah? toca también una reflexi?n en la que no podemos dejarnos llevar por esos sustos muertes diarios que hay en Madrid porque eso no es la vida real de nuestro pa?s. Nuestro pa?s se parece m?s a lo que hay m?s all? del territorio de provincias y de las comunidades aut?nomas que lo que hay de la M40.

Nuestro pa?s se parece m?s a lo que hay m?s all? del territorio de provincias y de las comunidades aut?nomas que lo que hay de la M40







Quiero contribuir a ese desembarramiento de la pol?tica, a recuperar el debate, genuino y honesto, a?n desde la discrepancia. Soy profesor de instituto, estoy en un claustro con m?s de 100 profesores y evidentemente hay profesores progresistas, de izquierda, de derecha y seguramente habr? de extrema derecha pero la articulaci?n profesional me hace ver a la pol?tica de Madrid el envenenamiento, de la toxicidad, que ahora mismo hay en la pol?tica de Madrid no puede ser la que traslade a los espacios profesionales o sociales esa nueva cultura que es una fea cultura o modo de relacionarse.

Cuando se fue hace cinco a?os dijo que respond?a "a razones profundamente personales y de necesario descanso". ?Qué pens? el otro d?a cuando el presidente comparti? esa carta abierta?

De profunda empat?a con alguien que sufre. Es decir, hay alguien que sufre, sea quien sea, me genera siempre un sentimiento de empat?a y de solidaridad. Te puede gustar m?s el presidente o menos pero el nivel de ataque en términos personales y de denigraci?n de su familia que ha sufrido Pedro S?nchez no se ha visto nunca. Esa empat?a surge porque creo que, ante el sufrimiento, sale lo mejor del ser humano. En segundo lugar porque también la pol?tica no debe dejar de ser esencialmente una actividad humana.

Veo en Pedro S?nchez, quiz?s, una tentaci?n que espero que la diluya una tentaci?n plebiscitaria







Pero...

Ahora, en términos pol?ticos, si echo de menos que si t? tomas una decisi?n en clave pol?tica de seguir tiene que ir acompa?ado de medidas. Con su comparecencia, fue un alivio porque se qued? pero eche de menos una serie de compromisos pol?ticos en términos de reforma de la justicia renovaci?n del Consejo General del Poder Judicial, la modificaci?n de la ley Mordaza, el fortalecimiento de medidas de car?cter laboral como la subida de los salarios, la reducci?n de la jornada… Yo eche de menos en Pedro S?nchez eso y veo, quiz?s, una tentaci?n que espero que la diluya una tentaci?n plebiscitaria.



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