Reem
02-20-2023, 07:57 AM
Que un club pagase durante a?os al vicepresidente del Comité de ?rbitros (https://www.sport.es/es/noticias/opinion/preguntas-respuestas-caso-enriquez-negreira-83206058) mientras estaba en activo, no tiene defensa. Hay un conflicto de intereses evidente. Apl?quese lo de la mujer del César.
M?s informaci?n (Auto)
http://placehold.it/175x100 T?tulo noticia (Auto)
Eso es tan cierto como que, por ahora, no han aparecido pruebas s?lidas que prueben correlaci?n alguna entre los servicios ofrecidos por la empresa de Enr?quez Negreira y un presunto trato de favor arbitral. Seg?n varios ?rbitros, Negreira no ten?a peso alguno en las designaciones, pero s? acceso a abundante informaci?n de su gremio.
Entre los colegiados, la indignaci?n es m?xima. Por eso resulta incomprensible que el CTA siga sin presentar una querella. Al parecer, seg?n Medina Cantalejo, actual jefe de los ?rbitros, Negreira era un se?or que pasaba por ah?, del que se sab?a poco y decid?a menos. Era un elemento decorativo, dicen. Un florero. Un jarr?n chino de la dinast?a Ming.
Precisamente por eso, los socios del Barça est?n obligados a preguntarse quién contrat? a Negreira (https://www.sport.es/es/noticias/barca/minguella-he-planteado-seriamente-socio-83253920), por qué sus honorarios eran tan elevados y por qué se pag? durante a?os, cuando hasta un ni?o de teta se habr?a dado cuenta de que, esa relaci?n, tan larga como est?pida, era t?xica.
El FCB tiene dos caminos y debe elegir: El primero, culpar al empedrado y la prensa; y el segundo, ponerse a disposici?n de la justicia, explicar quién firm? ese contrato a Negreira y por qué cuatro presidentes distintos no pararon eso.
Los pagos a Negreira son inmorales. No hay bufanda que valga cerrar los ojos a unas pr?cticas que, a nivel ético, son indefendibles. Y si uno es socio del Barça, no es menos blaugrana por reconocerlo.
Incluso en el supuesto caso de que Negreira quisiera chantajear al club, el Barça pag? lo que pag?, metiéndose en un berenjenal innecesario, con el dinero del socio.
De entrada, en este caso no habr? sanci?n administrativa porque los hechos est?n prescritos -la nueva Ley del Deporte en este aspecto es igual que la antigua por m?s que algunos mientan como bellacos-, pero est? por ver qué pasa con este asunto si avanza la v?a penal.
Mientras la justicia sigue su curso y mientras todo el mundo sea inocente hasta que se demuestre lo contrario, el Barça hacer autocr?tica, depurar responsabilidades y responder preguntas inc?modas.
Entre otras cosas, porque m?s all? del tiroteo legal, hay una bala que el Barça no puede esquivar, la de la condena social. Esa no prescribe. Acabe como acabe toda esta historia, tenga las consecuencias que tenga, el socio tiene algo claro: Si Negreira de verdad era un jarr?n chino de la dinast?a Ming, ha sido car?simo, porque ha causado un da?o irreparable para la imagen del club. Un da?o que no se puede pagar con dinero. Un da?o que no merece el socio.
ÃßËÑ... (https://www.sport.es/es/noticias/opinion/jarron-dinastia-ming-83257507)
M?s informaci?n (Auto)
http://placehold.it/175x100 T?tulo noticia (Auto)
Eso es tan cierto como que, por ahora, no han aparecido pruebas s?lidas que prueben correlaci?n alguna entre los servicios ofrecidos por la empresa de Enr?quez Negreira y un presunto trato de favor arbitral. Seg?n varios ?rbitros, Negreira no ten?a peso alguno en las designaciones, pero s? acceso a abundante informaci?n de su gremio.
Entre los colegiados, la indignaci?n es m?xima. Por eso resulta incomprensible que el CTA siga sin presentar una querella. Al parecer, seg?n Medina Cantalejo, actual jefe de los ?rbitros, Negreira era un se?or que pasaba por ah?, del que se sab?a poco y decid?a menos. Era un elemento decorativo, dicen. Un florero. Un jarr?n chino de la dinast?a Ming.
Precisamente por eso, los socios del Barça est?n obligados a preguntarse quién contrat? a Negreira (https://www.sport.es/es/noticias/barca/minguella-he-planteado-seriamente-socio-83253920), por qué sus honorarios eran tan elevados y por qué se pag? durante a?os, cuando hasta un ni?o de teta se habr?a dado cuenta de que, esa relaci?n, tan larga como est?pida, era t?xica.
El FCB tiene dos caminos y debe elegir: El primero, culpar al empedrado y la prensa; y el segundo, ponerse a disposici?n de la justicia, explicar quién firm? ese contrato a Negreira y por qué cuatro presidentes distintos no pararon eso.
Los pagos a Negreira son inmorales. No hay bufanda que valga cerrar los ojos a unas pr?cticas que, a nivel ético, son indefendibles. Y si uno es socio del Barça, no es menos blaugrana por reconocerlo.
Incluso en el supuesto caso de que Negreira quisiera chantajear al club, el Barça pag? lo que pag?, metiéndose en un berenjenal innecesario, con el dinero del socio.
De entrada, en este caso no habr? sanci?n administrativa porque los hechos est?n prescritos -la nueva Ley del Deporte en este aspecto es igual que la antigua por m?s que algunos mientan como bellacos-, pero est? por ver qué pasa con este asunto si avanza la v?a penal.
Mientras la justicia sigue su curso y mientras todo el mundo sea inocente hasta que se demuestre lo contrario, el Barça hacer autocr?tica, depurar responsabilidades y responder preguntas inc?modas.
Entre otras cosas, porque m?s all? del tiroteo legal, hay una bala que el Barça no puede esquivar, la de la condena social. Esa no prescribe. Acabe como acabe toda esta historia, tenga las consecuencias que tenga, el socio tiene algo claro: Si Negreira de verdad era un jarr?n chino de la dinast?a Ming, ha sido car?simo, porque ha causado un da?o irreparable para la imagen del club. Un da?o que no se puede pagar con dinero. Un da?o que no merece el socio.
ÃßËÑ... (https://www.sport.es/es/noticias/opinion/jarron-dinastia-ming-83257507)