Reem
08-01-2023, 04:43 PM
Mostraba las grietas de su casa, asegur? que el radiador llegaba a vibrar y apunt? a la posibilidad de que su vecina practicaba la prostituci?n. El Tribunal Supremo ha confirmado la condena a una vecina de Salamanca que en 2017 denunci? en 'La Ma?ana' de Televisi?n Espa?ola que no pod?a dormir por los ruidos relacionados con la "fogosidad" sexual (https://www.epe.es/es/sociedad/20230801/condena-10000-euros-airear-fogosidad-vecina-tribunal-supremo-90557486) de la mujer con la que conviv?a pared con pared.
El alto tribunal considera que sus manifestaciones, "por la forma que se hicieron, suponen un atentado tanto a la intimidad como a la reputaci?n personal de la demandante en modo tal que provocan objetivamente su descrédito". Por esta raz?n, tanto esta mujer como Radio Televisi?n Espa?ola son condenadas a pagar conjunta y solidariamente una indemnizaci?n de 10.000 euros a la vecina aludida en el reportaje.
La vecina mencionada en el reportaje emitido, de unos diez minutos de duraci?n, present? una demanda contra TVE por la la informaci?n se divulgaba que una joven hab?a sido multada por el Ayuntamiento por hacer ruidos que superaban los decibelios permitidos.
Recog?a que la periodista afirmaba que los ruidos proven?an de la cama de la vecina de arriba, por su actividad nocturna, que provocaban que se cayeran las cosas de la estanter?a de la denunciante. En el reportaje -seg?n la demanda- aparec?a una mujer que se quejaba de que no pod?a dormir a causa de la fogosidad de su vecina de arribay daba detalles de las expresiones que escuchaba.
Libertad de expresi?n
Un juzgado de Salamanca desestim? la demanda en la que solicitaba una indemnizaci?n de 20.000 euros por intromisi?n ileg?tima en sus derechos al honor, a la intimidad y a la propia imagen. La decisi?n del juzgado se bas?, entre otros motivos, en que las expresiones de la mujer que aparec?a en el reportaje sobre su vecina estaban amparadas por la libertad de expresi?n.
La Audiencia Provincial de Salamanca estim? parcialmente la demanda y conden? a la cadena a publicar a su costa, el fallo de la sentencia en La Gaceta de Salamanca, as? como a leerlo en el programa en el que se difundi? o en otro an?logo que pudiera haberle sustituido o, en su defecto, en el informativo de m?xima audiencia.
La sentencia recurrida entendi? que la informaci?n y las expresiones emitidas no se refer?an a asuntos de relevancia p?blica ni interés general y que solo el morbo hizo que se convirtieran en noticias aspectos de la vida ?ntima de una persona con insinuaciones reiteradas sobre que los ruidos estaban relacionados con su vida sexual, con sugerencias de promiscuidad e insinuaciones sobre si pod?a dedicarse a la prostituci?n.
El Tribunal Supremo considera que el juicio de ponderaci?n realizado por la Audiencia Provincial, para la que el derecho al honor y la intimidad de la recurrida prevalece sobre la libertad de expresi?n de la recurrente, es correcto, y que el recurso de casaci?n interpuesto por esta debe ser desestimado.
En su sentencia, ponencia de la magistrada Maria ?ngeles Parra, se indica que a pesar de que la recurrente insiste en el car?cter noticioso de la contaminaci?n ac?stica, y que ese es un asunto de interés y relevancia p?blica, la Sala comparte el criterio de la sentencia recurrida “cuando afirma que las manifestaciones se encuentran imbricadas en unas relaciones de vecindad, con escasa relevancia p?blica”.
“La recurrida alude a la vida privada de su vecina, lo que dice que oye, a la frecuencia con la que escucha los ruidos y su intensidad. De este modo, a la vista de los hechos probados, ni el reportaje ni las manifestaciones de la recurrente versaban sobre la contaminaci?n ac?stica, sino sobre los ruidos producidos supuestamente por la actividad sexual de la recurrida, que se convierte directamente en la noticia y en objeto del reportaje”, subraya la Sala.
La sentencia explica que, si bien resultaba leg?timo que la recurrente denunciara los ruidos molestos procedentes del piso de arriba y por los que se sancion? a la recurrida, "no est? justificado y es desproporcionado que aireara en un programa de televisi?n que las molestias ac?sticas producidas pudieran proceder de la intensa actividad sexual de la vecina demandante ahora recurrida".
Por otra parte, a?ade que por lo que se refiere a la identificaci?n de la demandante, el recurso no respeta el relato f?ctico de la sentencia recurrida que concluye, tras analizar los datos que se proporcionaron en el reportaje que "... aunque al tratarse de un personaje privado, obviamente solo puede ser identificada por personas que la conocen. Pero, sin duda, con lo datos ofrecidos, quien conociese a ……. sabr?a, viendo el reportaje, que se trataba de ella".
Finalmente, rechaza el argumento de la recurrente acerca de que se limitaba a responder a las preguntas que le hac?a el periodista puesto que, seg?n se recoge en la sentencia de apelaci?n, la recurrente participa activamente en el reportaje quej?ndose de la fogosidad de su vecina, apuntando como causa de las grietas de su techo a los "meneos que pegan los de arriba", o diciendo que el radiador llega a vibrar, y refiere expresiones que dice que escucha con tal detalle que se llega a advertir por la conductora del programa que se est? emitiendo en horario infantil.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/sociedad/condena-10-000-euros-airear-90560015)
El alto tribunal considera que sus manifestaciones, "por la forma que se hicieron, suponen un atentado tanto a la intimidad como a la reputaci?n personal de la demandante en modo tal que provocan objetivamente su descrédito". Por esta raz?n, tanto esta mujer como Radio Televisi?n Espa?ola son condenadas a pagar conjunta y solidariamente una indemnizaci?n de 10.000 euros a la vecina aludida en el reportaje.
La vecina mencionada en el reportaje emitido, de unos diez minutos de duraci?n, present? una demanda contra TVE por la la informaci?n se divulgaba que una joven hab?a sido multada por el Ayuntamiento por hacer ruidos que superaban los decibelios permitidos.
Recog?a que la periodista afirmaba que los ruidos proven?an de la cama de la vecina de arriba, por su actividad nocturna, que provocaban que se cayeran las cosas de la estanter?a de la denunciante. En el reportaje -seg?n la demanda- aparec?a una mujer que se quejaba de que no pod?a dormir a causa de la fogosidad de su vecina de arribay daba detalles de las expresiones que escuchaba.
Libertad de expresi?n
Un juzgado de Salamanca desestim? la demanda en la que solicitaba una indemnizaci?n de 20.000 euros por intromisi?n ileg?tima en sus derechos al honor, a la intimidad y a la propia imagen. La decisi?n del juzgado se bas?, entre otros motivos, en que las expresiones de la mujer que aparec?a en el reportaje sobre su vecina estaban amparadas por la libertad de expresi?n.
La Audiencia Provincial de Salamanca estim? parcialmente la demanda y conden? a la cadena a publicar a su costa, el fallo de la sentencia en La Gaceta de Salamanca, as? como a leerlo en el programa en el que se difundi? o en otro an?logo que pudiera haberle sustituido o, en su defecto, en el informativo de m?xima audiencia.
La sentencia recurrida entendi? que la informaci?n y las expresiones emitidas no se refer?an a asuntos de relevancia p?blica ni interés general y que solo el morbo hizo que se convirtieran en noticias aspectos de la vida ?ntima de una persona con insinuaciones reiteradas sobre que los ruidos estaban relacionados con su vida sexual, con sugerencias de promiscuidad e insinuaciones sobre si pod?a dedicarse a la prostituci?n.
El Tribunal Supremo considera que el juicio de ponderaci?n realizado por la Audiencia Provincial, para la que el derecho al honor y la intimidad de la recurrida prevalece sobre la libertad de expresi?n de la recurrente, es correcto, y que el recurso de casaci?n interpuesto por esta debe ser desestimado.
En su sentencia, ponencia de la magistrada Maria ?ngeles Parra, se indica que a pesar de que la recurrente insiste en el car?cter noticioso de la contaminaci?n ac?stica, y que ese es un asunto de interés y relevancia p?blica, la Sala comparte el criterio de la sentencia recurrida “cuando afirma que las manifestaciones se encuentran imbricadas en unas relaciones de vecindad, con escasa relevancia p?blica”.
“La recurrida alude a la vida privada de su vecina, lo que dice que oye, a la frecuencia con la que escucha los ruidos y su intensidad. De este modo, a la vista de los hechos probados, ni el reportaje ni las manifestaciones de la recurrente versaban sobre la contaminaci?n ac?stica, sino sobre los ruidos producidos supuestamente por la actividad sexual de la recurrida, que se convierte directamente en la noticia y en objeto del reportaje”, subraya la Sala.
La sentencia explica que, si bien resultaba leg?timo que la recurrente denunciara los ruidos molestos procedentes del piso de arriba y por los que se sancion? a la recurrida, "no est? justificado y es desproporcionado que aireara en un programa de televisi?n que las molestias ac?sticas producidas pudieran proceder de la intensa actividad sexual de la vecina demandante ahora recurrida".
Por otra parte, a?ade que por lo que se refiere a la identificaci?n de la demandante, el recurso no respeta el relato f?ctico de la sentencia recurrida que concluye, tras analizar los datos que se proporcionaron en el reportaje que "... aunque al tratarse de un personaje privado, obviamente solo puede ser identificada por personas que la conocen. Pero, sin duda, con lo datos ofrecidos, quien conociese a ……. sabr?a, viendo el reportaje, que se trataba de ella".
Finalmente, rechaza el argumento de la recurrente acerca de que se limitaba a responder a las preguntas que le hac?a el periodista puesto que, seg?n se recoge en la sentencia de apelaci?n, la recurrente participa activamente en el reportaje quej?ndose de la fogosidad de su vecina, apuntando como causa de las grietas de su techo a los "meneos que pegan los de arriba", o diciendo que el radiador llega a vibrar, y refiere expresiones que dice que escucha con tal detalle que se llega a advertir por la conductora del programa que se est? emitiendo en horario infantil.
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