Reem
07-26-2023, 06:00 AM
Cualquier pasado de las mujeres ciclistas no fue mejor a los tiempos actuales y quiz?s hace a?os cuando el ciclismo femenino navegaba pr?cticamente en la clandestinidad nadie pod?a imaginar que un miércoles 26 de julio de 2023 las corredoras iban a superar una*etapa de 177 kil?metros*en la segunda edici?n del Tour Femmes con un final explosivo de los que llaman a crear afici?n.
Y es que las corredoras que a finales del siglo XX se aventuraban en una carrera a la que no permit?an denominar Tour de Francia, pese a correrse en este pa?s, afrontaban la competici?n en unas condiciones absolutamente distintas a las de ahora. La prueba se denominaban la*Grande Boucle Femenina*y corr?an bajo la prohibici?n de usar cualquier referencia a la ronda francesa.
Mientras ellos dorm?an en hoteles de tres o cuatro estrellas, ellas*pernoctaban en albergues, lo que ahora llamar?amos un hostel de los de literas en habitaciones compartidas. Mientras ellos se desplazaban en flamantes autocares, ellas viajaban de etapa a etapa en el coche de los equipos. Muchas veces ni siquiera ten?an sitio para cambiar la ropa de calle a la de competici?n y siempre se colaba alg?n mir?n que posiblemente estaba m?s en la salida por el morbo que por la afici?n al ciclismo.
Trato despectivo
Recuerdo en uno de los primeros mundiales de ciclismo que cubr? como una de las principales figuras femeninas, que viajaban con la selecci?n espa?ola; eso s? durmiendo en el mejor hotel de la zona al igual que las estrellas masculinas, ped?a el*auxilio de uno de los mec?nicos*del conjunto masculino porque le hac?a ruido el doble plato de su bici. De mala gana el auxiliar le repar? la bicicleta, pero se sent?a como ofendido por lo que al marcharse la corredora expresaba un comentario nada afortunado: “el plato, te hace ruido el plato, a la cocina te mandaba yo”. Y eso que la afectada era la*estrella del equipo.
Pero es que ellas viajaban sin apenas mec?nicos y hasta buscaban desesperadamente la ayuda de los fisios del conjunto masculino porque ellos sab?an sobradamente como*recuperar las piernas*después del ajetreo de la competici?n y necesitaban el mismo alivio que sus compa?eros siempre m?s afortunados y mejor pagados.
Diferente pero no igual
En el*Tour Femmes*todo es diferente al pasado, salvo los salarios que, aunque cada vez crecen m?s -el m?nimo entre los equipos de primer nivel oscila entre los 40 y los 60 mil euros anuales- todav?a est?n*a a?os luz*de los varones. Llevan el mismo material, viajan en autocares, aunque todav?a queda alg?n equipo m?s modesto que lo hace en autocaravana, y cada vez cuentan con mayor n?mero de mec?nicos y masajistas, lo que habr?a sido un sue?o para pioneras como*Dori Ruano*o*Joane Somarriba, auténticas campeonas entre finales del siglo pasado y los inicios del actual.
As? que el reto de 177 kil?metros, impensable hace unos a?os, va en concordancia a los sistemas de preparaci?n, a la alimentaci?n y, en resumidas cuentas, a un profesionalismo que en este aspecto poco tiene que envidiar a un deporte que hace unas décadas parec?a exclusivo para*un solo sexo.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/tour-francia/hubo-epoca-mujer-ciclista-90328981)
Y es que las corredoras que a finales del siglo XX se aventuraban en una carrera a la que no permit?an denominar Tour de Francia, pese a correrse en este pa?s, afrontaban la competici?n en unas condiciones absolutamente distintas a las de ahora. La prueba se denominaban la*Grande Boucle Femenina*y corr?an bajo la prohibici?n de usar cualquier referencia a la ronda francesa.
Mientras ellos dorm?an en hoteles de tres o cuatro estrellas, ellas*pernoctaban en albergues, lo que ahora llamar?amos un hostel de los de literas en habitaciones compartidas. Mientras ellos se desplazaban en flamantes autocares, ellas viajaban de etapa a etapa en el coche de los equipos. Muchas veces ni siquiera ten?an sitio para cambiar la ropa de calle a la de competici?n y siempre se colaba alg?n mir?n que posiblemente estaba m?s en la salida por el morbo que por la afici?n al ciclismo.
Trato despectivo
Recuerdo en uno de los primeros mundiales de ciclismo que cubr? como una de las principales figuras femeninas, que viajaban con la selecci?n espa?ola; eso s? durmiendo en el mejor hotel de la zona al igual que las estrellas masculinas, ped?a el*auxilio de uno de los mec?nicos*del conjunto masculino porque le hac?a ruido el doble plato de su bici. De mala gana el auxiliar le repar? la bicicleta, pero se sent?a como ofendido por lo que al marcharse la corredora expresaba un comentario nada afortunado: “el plato, te hace ruido el plato, a la cocina te mandaba yo”. Y eso que la afectada era la*estrella del equipo.
Pero es que ellas viajaban sin apenas mec?nicos y hasta buscaban desesperadamente la ayuda de los fisios del conjunto masculino porque ellos sab?an sobradamente como*recuperar las piernas*después del ajetreo de la competici?n y necesitaban el mismo alivio que sus compa?eros siempre m?s afortunados y mejor pagados.
Diferente pero no igual
En el*Tour Femmes*todo es diferente al pasado, salvo los salarios que, aunque cada vez crecen m?s -el m?nimo entre los equipos de primer nivel oscila entre los 40 y los 60 mil euros anuales- todav?a est?n*a a?os luz*de los varones. Llevan el mismo material, viajan en autocares, aunque todav?a queda alg?n equipo m?s modesto que lo hace en autocaravana, y cada vez cuentan con mayor n?mero de mec?nicos y masajistas, lo que habr?a sido un sue?o para pioneras como*Dori Ruano*o*Joane Somarriba, auténticas campeonas entre finales del siglo pasado y los inicios del actual.
As? que el reto de 177 kil?metros, impensable hace unos a?os, va en concordancia a los sistemas de preparaci?n, a la alimentaci?n y, en resumidas cuentas, a un profesionalismo que en este aspecto poco tiene que envidiar a un deporte que hace unas décadas parec?a exclusivo para*un solo sexo.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/tour-francia/hubo-epoca-mujer-ciclista-90328981)